lunes, 14 de mayo de 2018

El Personal Británico de la UE afectado por el Brexit, adopta la nacionalidad europea

BRUSELAS (Reuters) - Alrededor de uno de cada 10 cargos públicos británicos en la Comisión Europea han adoptado otra nacionalidad europea desde el referéndum del Brexit, aunque están resignados a las escasas perspectivas de ascenso futuro.

Las cifras de los datos de la Unión Europea proporcionados a la agencia Reuters y las entrevistas reflejan una perspectiva pesimista del futuro en Bruselas para los casi 900 funcionarios británicos restantes en el ejecutivo de la UE una vez que Reino Unido abandone el bloque en marzo del próximo año tras su referéndum en junio de 2016.

También destacan el papel de la nacionalidad en el progreso laboral dentro de la UE a pesar de haber un tabú formal sobre la discriminación por el pasaporte, como algunos británicos ya han descubierto.

“Como británicos, nuestras carreras aquí han terminado”, dijo un cargo medio con 20 años de servicio en la Comisión que, al igual que muchos de sus compañeros, ahora ha adquirido un pasaporte de Irlanda por tener antepasados en este país.

“Pero nadie me va a ver como irlandés. Básicamente se trata de una póliza de seguro por el momento”.

El presidente Jean-Claude Juncker prometió formalmente al personal británico a finales de marzo que la Comisión no ejercería su derecho a despedirlos tras el 29 de marzo de 2019, cuando pierdan la ciudadanía de la UE, que es un requisito básico para el empleo.

Pero a pesar de las muestras de simpatía desde la cúpula por su difícil situación, muchos británicos ya han emprendido el camino de vuelta.

Los datos públicos demuestran que el 1 de junio de este año había 894 empleados de la Comisión cuya primera nacionalidad registrada de forma oficial era la británica. Una reducción de 135 personas, es decir un 13 por ciento menos que el año anterior, y 240 menos (21 por ciento) que en el inicio de 2016.

Los datos internos citados por un responsable de la UE mostraron que desde mayo de 2016 “algo más de 150” británicos se jubilaron, renunciaron o se marcharon tras finalizar un tipo de contrato temporal que posee una cuarta parte de los 32.000 trabajadores de la Comisión; se contrató a unos 65 ciudadanos británicos, pero todos menos cuatro de ellos tenían contratos a corto plazo.

NUEVOS PASAPORTES

Sorprendentemente, en comparación con esta reducción neta de 85, “un número ligeramente superior a 100” británicos más también cambiaron su “primera nacionalidad” a otro de los 27 estados de la UE, especialmente a Irlanda, donde muchos millones de británicos tienen sus raíces, así como a Francia.


En un tuit enviado el día después de que la votación del Brexit deprimiera a sus colegas, un funcionario británico de la UE con doble nacionalidad publicó una foto de una botella de whisky irlandés. Escribió: “Es hora de conectar con mi lado irlandés para adormecer mi herido lado británico”.

Reino Unido permite la doble nacionalidad, por lo que aquellos que adoptan otra nacionalidad de la UE no están obligados a renunciar a su ciudadanía británica. Reuters (Un pasaporte británico sobre una bandera europea, Bruselas, 20 de junio de 2016. REUTERS/Francois Lenoir/Ilustración)