LONDRES/BRUSELAS (Reuters) - La primera ministra británica, Theresa May, viajará a Bruselas el jueves para decirles a los líderes de la Unión Europea que deben aceptar cambios legalmente vinculantes a los acuerdos sobre la frontera irlandesa presentes en el pacto de divorcio o enfrentarán la posibilidad de un Brexit desordenado.
Reino Unido tiene que abandonar la UE en solo 52 días. Sin embargo, Londres y Bruselas aún discuten si se puede modificar el acuerdo alcanzado en noviembre, lo que aumenta la posibilidad de un retraso del Brexit, un acuerdo de última hora o una salida que no sea pactada.
Desde que los legisladores británicos rechazaron el acuerdo de salida el mes pasado, el Parlamento ha ordenado a May que reemplace su punto más polémico: una póliza de seguro que cubre las posibles medidas futuras para la frontera entre Irlanda, un país miembro de la UE, y la provincia británica de Irlanda del Norte.
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, recibirá a May en Bruselas el jueves.
“La posición de la Unión Europea es clara”, dijo la portavoz Margaritis Schinas. “Estamos esperando una vez más para escuchar lo que la primera ministra tiene que decirnos”.
May tratará de usar una visita a Irlanda del Norte el martes para tranquilizar a las comunidades, asegurando que podrá lograr un Brexit ordenado que garantizará la paz en una provincia dividida durante tres décadas de conflicto que finalizó con un acuerdo en 1998.
El Partido Unionista Democrático de Irlanda del Norte (DUP, por sus siglas en inglés), que ha apoyado al gobierno de May desde que perdió su mayoría parlamentaria en las elecciones generales de 2017, dijo que quería lograr un acuerdo, pero dejó en claro que había que reemplazar la salvaguarda fronteriza.
“El actual mecanismo de protección, como he dicho todo el tiempo, es tóxico para los que vivimos en Irlanda del Norte”, dijo a la radio de la BBC Arlene Foster, líder del DUP, quien se reunirá con May en Belfast el miércoles.
Foster se negó a decir si el acuerdo tendría que ser renegociado o si ella aceptaría garantías legalmente vinculantes.
“Si la salvaguarda es abordada en el acuerdo de salida, entonces, a pesar del hecho de que podamos tener dudas sobre otras partes del acuerdo, apoyaremos a la primera ministra porque queremos que el Brexit se realice de manera ordenada”, agregó.
Reino Unido, Irlanda y la UE quieren evitar los controles físicos en la frontera entre Irlanda e Irlanda del Norte que terminaron con el llamado Acuerdo de Viernes Santo de 1998. May visitará Bruselas el jueves en busca de acuerdo del Brexit