PROVIDENCE, Rhode Island, EE.UU. (AP) — Cuando se le acabaron los cheques debido al cierre parcial del gobierno federal, Cheryl Inzunza Blum buscó una fuente alternativa de ingresos que se ha vuelto popular en la actual economía: alquiló una habitación en Airbnb.
Otros empleados del gobierno federal están manejando para Uber, dependiendo de avisos boca a boca y redes sociales para encontrar trabajos temporales en mantenimiento y otros para ayudar a pagar cuentas durante el cierre federal más largo en la historia estadounidense.