
BIRMINGHAM, Inglaterra (Reuters) - Antes de que asesinara a cuatro personas en el ataque más mortal perpetrado en Reino Unido desde las bombas que explotaron en Londres en 2005, funcionarios británicos de inteligencia consideraban a Khalid Masood como un delincuente que no suponía una amenaza seria.
Masood, que nació en Reino Unido y posteriormente se convirtió en musulmán, había figurado en la periferia de anteriores investigaciones sobre terrorismo, lo cual lo situó bajo el radar de la agencia de inteligencia británica MI5.
Sin embargo, el hombre de 52 años no estaba siendo investigado cuando condujo el miércoles a gran velocidad a través del puente de Westminster, arremetiendo contra peatones con un vehículo alquilado antes