WASHINGTON (AP) — El secretario de Defensa, Jim Mattis, renunció el jueves tras un desacuerdo con el presidente Donald Trump sobre el abrupto retiro de las tropas estadounidenses de Siria y tras casi dos años de discordias sobre el papel de Estados Unidos en el mundo.
Mattis, quizá el funcionario de política exterior más respetado en el gobierno de Trump, dejará su cargo a finales de febrero después de dos tumultuosos años en los que se empeñó en suavizar y moderar la intransigencia del presidente, y sus cambiantes políticas. Dijo a Trump en una carta que renunciaba porque “tiene derecho a contar con un secretario de Defensa cuyos puntos de vista estén más alineados con los suyos”.