
WASHINGTON (AP) — Las declaraciones públicas del miércoles del fiscal especial Robert Mueller, las primeras que vierte en relación con la investigación sobre Rusia, han dado pie a nuevos llamados en el Capitolio para abrir un juicio político al presidente Donald Trump, algo a lo que los líderes legislativos demócratas se han opuesto hasta la fecha.
En breves y sorprendentes aseveraciones en Washington, Mueller señaló que corresponde al Congreso decidir qué hacer con las conclusiones que ha presentado. El fiscal especial reiteró que por política del Departamento de Justicia, acusar a un presidente de un delito “no era una opción”. Pero subrayó asimismo que no podía exonerar a Trump. No obstante, señaló que la mencionada política estipula que “la Constitución obliga a un proceso que no sea en el sistema de justicia penal”.