Moscú, 7 de abril, 2017 (AP). Rusia reaccionó ante los ataques militares de Estados Unidos a su aliado Siria cortando una línea de comunicación directa diseñada para impedir colisiones aéreas, una respuesta que demuestra la disposición de Moscú para desafiar a Washington y que incluso podría llevar a las dos superpotencias nucleares hacia un enfrentamiento militar.
El presidente Vladimir Putin indicó que estaba dispuesto a correr el riesgo de un choque con Estados Unidos y descartar las esperanzas de reparar los lazos con la Unión bajo la presidencia de Donald Trump antes que aceptar la humillación de observar en silencio el bombardeo a un aliado.