Bogotá, 29 de noviembre, 2016 (Reuters). Un avión que transportaba a los integrantes del equipo de fútbol Chapecoense de Brasil para jugar la final de la Copa Sudamericana se estrelló en una zona montañosa del noroeste de Colombia y 75 de sus 81 ocupantes murieron, informaron el martes autoridades.
Seis de los ocupantes, entre quienes se encuentran tres futbolistas, sobrevivieron al accidente de la aeronave tipo Bae Avro RJ85 que se precipitó a tierra hacia las 22.15 horas del lunes (0315 GMT del martes) cerca del municipio de La Unión, en el departamento de Antioquia, en medio de adversas condiciones climáticas, dijo la Aeronáutica Civil.
"Una aeronave procedente de Bolivia de la empresa Lamia con matrícula LMI 2933 RJ 80 se accidentó en el cerro El Gordo, en cercanías al municipio de la Unión, Antioquia, con 72 pasajeros y 9 tripulantes a bordo, los cuales pertenecen al equipo Chapecoense de Brasil", precisó un comunicado de la Aeronáutica colombiana en el que reportó el siniestro.
Inicialmente el jefe regional de la policía, general José Gerardo Acevedo, había reportado 76 muertos y cinco sobrevivientes.
El director de la Aeronáutica Civil, Alfredo Bocanegra, reveló que la tripulación reportó fallas eléctricas antes del accidente.
"No existe evidencia de combustible en la aeronave", sostuvo el funcionario al referirse a una hipótesis según la cual el avión se quedó sin gasolina en la aproximación a la pista.
El equipo brasileño llegaba a la ciudad de Medellín para disputar el miércoles el partido de ida por la final de Copa Sudamericana con Atlético Nacional de Colombia.
El Departamento Administrativo del Sistema para la Prevención, Atención y Recuperación de Desastres de la Gobernación de Antioquia dijo que el avión fue reportado como extraviado a escasos minutos de aterrizar en el aeropuerto José María Córdova.
El avión, de la empresa Lamia Corporation SRL, procedía del aeropuerto Viru Viru de Santa Cruz de la Sierra, en Bolivia, y debió aterrizar en el terminal que sirve a la ciudad de Medellín.
En la zona en donde se estrelló el avión se registraban lluvias y escasa visibilidad, lo que obligó a suspender momentáneamente las labores de rescate.
La oscuridad de la noche y las malas condiciones climatológicas también impidieron la operación de helicópteros militares y civiles para apoyar las labores de rescate, informaron fuentes castrenses.
La Confederación Sudamericana de Fútbol suspendió hasta nueva orden todas las actividades competitivas y lamentó el accidente.
Atlético Nacional, el rival del club brasileño, también lamentó el accidente en un mensaje por su cuenta de Twitter.
Socorristas y bomberos empezaron las labores de rescate de las víctimas y el traslado de los cuerpos a la ciudad de Medellín.