Washington, 8 de diciembre, 2016 (AP). El presidente del sindicato fustigado por Donald Trump en Twitter retó al presidente electo el jueves a que pruebe su afirmación de que un acuerdo para convencer a Carrier Corp. para que no cierre una fábrica en Indiana salvaría 1100 empleos.
"Él reaccionó exageradamente", le dijo a la CNN el presidente del Local 1999 del gremio United Steelworkers, Alex Jones. "Debió haber tratado de justificar sus cifras".
Trump y el vicepresidente electo Mike Pence —gobernador de Indiana— visitaron la planta de Carrier en Indianápolis el 1 de diciembre para celebrar el acuerdo. Trump dijo que el número de empleos salvados pudiera superar 1100. Jones dice que la cifra es mucho menor porque la fábrica perderá aún 400 empleos.
"Muchas personas que pensaron entonces que tendrían trabajo pudieran no tenerlo", dijo Jones el jueves.
El miércoles por la noche, Trump dijo en Twitter: "Chuck Jones, que es presidente de United Steelworkers 1999, ha hecho un trabajo terrible a la hora de representar a los trabajadores".
Esa filial local del gremio representa a los trabajadores de la planta de Carrier en Indianápolis.
En un segundo mensaje en Twitter, Trump dijo que Jones debería "pasarse más tiempo trabajando y menos tiempo hablando" y dijo que el gremio debería reducir sus cuotas.
Unos 30 minutos después que Trump escribió sus tuits sobre Jones, el dirigente sindical comenzó a recibir llamadas de hostigamiento, le dijo a MSNBC.