Londres, 11 jul (EFE).- La primera ministra británica, Theresa May, buscó hoy recuperar su liderazgo pidiendo la colaboración de la oposición para responder a los desafíos que presenta el "brexit" y a la precariedad laboral en el Reino Unido.
La líder conservadora aprovechó la publicación hoy de un informe en materia laboral para colocar el empleo en el centro de su agenda de Gobierno, al tiempo que reconoció su diferente situación política tras perder la mayoría absoluta en las elecciones del 8 de junio.
La jefa del Gobierno apeló a los diputados de otras formaciones para que "contribuyan" y ayuden a "clarificar y mejorar" las políticas que se deciden en el Parlamento, donde los conservadores de May dependen de los diez diputados del Partido Democrático Unionista (DUP) norirlandés para sacar adelante leyes importantes.
El resultado de los comicios "no era el que yo quería", admitió May, si bien insistió en que seguirá adelante con su prometido programa de reforma, que incluye atajar la precariedad laboral a fin de trabajar para "todos" y no para unos "pocos".
"El resultado del referéndum europeo (del 23 de junio de 2016) no fue solo un voto a favor de salir de la Unión Europea, sino una llamada más profunda por un cambio en todo el país", puntualizó.
May agregó que el país "necesita un Gobierno que esté preparado para tomar medidas audaces, necesarias para asegurar un futuro mejor para el Reino Unido". "Estamos determinados a ser ese Gobierno", sentenció.
Si bien se mostró a favor de acabar con los empleos denominados de "hora cero", en los que el contratado no tiene garantizadas unas determinadas horas de trabajo por parte del empleador, la primera ministra rechazó la petición de la oposición laborista de eliminarlos porque eso, "en vez de ayudar, dañaría a más gente".
May pronunció su discurso en la sede de la Real Sociedad de las Artes (RSA, por sus siglas en inglés) cuando está a punto de cumplirse un año desde que sucedió a David Cameron, quien dimitió pocos días después del referéndum en el que el pueblo británico apoyó el "brexit".
"Estoy convencida de que el camino que yo marqué en mi primer discurso frente a (la residencia oficial de) Downing Street y el que nos marcamos como Gobierno es aún el correcto. Esto llevará a un Reino Unido más fuerte y más justo, que necesitamos. Voy a cumplir con el cambio que la gente quiere", afirmó May.
La intervención de May coincidió con la publicación del llamado informe Taylor sobre prácticas laborales y que fue encargado hace unos años por el Gobierno para hacer reformas destinadas a acabar con el empleo barato y la merma de derechos de los trabajadores.
Sobre el informe Taylor, elaborado por el director ejecutivo de la RSA y exasesor del ex primer ministro laborista Tony Blair, la jefa del Gobierno prometió evaluarlo cuidadosamente antes de considerar si el Ejecutivo acepta las recomendaciones.
En ese sentido, May dijo que el empleo está en el "centro" del éxito del Reino Unido como país.
"Un trabajo puede ser una auténtica vocación, aportando los medios para una satisfacción intelectual y personal, así como una seguridad económica. Con un buen trabajo se puede tener dignidad y un sentido de autoestima. El trabajo puede promover salud mental y física y salud emocional", declaró la primera ministra.
Taylor propone en su documento revisar prácticas laborales como el pago en efectivo, utilizado habitualmente por trabajadores independientes como pintores o limpiacristales, pues en algunos casos no hacen sus aportaciones a la seguridad social.
En ese sentido, el autor del documento pide que en vez de pagarse en efectivo por determinados servicios, se haga a través de plataformas como tarjetas de crédito o el sistema de PayPal, lo que dificultará la evasión de impuestos. México :: Mundo