miércoles, 4 de octubre de 2017

Discurso de Theresa May ante activistas, no convence a británicos

MANCHESTER, Inglaterra (Reuters) - El intento de la primera ministra británica, Theresa May, por reafirmar su menguante autoridad fue frustrado el miércoles por un calamitoso discurso principal interrumpido por reiterados ataques de tos, un bromista e incluso letras de su eslogan que se cayeron del escenario.

May quería usar la conferencia anual del Partido Conservador para unir a su dividido partido y presentarse como la única persona capaz de lograr el Brexit y mantener fuera del poder al líder de los opositores laboristas, Jeremy Corbyn.

Comenzó disculpándose por su fallida apuesta a una elección anticipada en junio, que la despojó de su mayoría en el Parlamento, y luego presentó un “Sueño Británico” revitalizado para el que propuso reparar los mercados y unir al país.

Pero sus palabras fueron interrumpidas por el comediante británico Simon Brodkin, quien le entregó una carta P45, un documento entregado a los empleados cuando salen de su trabajo. El documento fue “firmado” por el comediante usando el nombre de su ambicioso secretario de Asuntos Exteriores, Boris Johnson.

Posteriormente, May tuvo un ataque de tos que la forzó a beber agua en reiteradas oportunidades, en que tosió incluso en el vaso, y su ministro de Finanzas, Philip Hammond, le dio una pastilla con un medicamento.

Mientras hablaba, se cayeron varias letras de los slogans detrás de ella, en el escenario. Algunos usuarios de Twitter aprovecharon imágenes de las palabras con letras faltantes para reírse de los conservadores: uno dijo que su pegamento estaba fallando incluso para mantener cohesionado al partido.

May, de 61 años, recibió ovaciones de pie por continuar con su discurso de una hora, en que adoptó un tono más personal cuando dijo que no le importaba que le dijeran “La Dama de Hielo” y describió su “gran pena” de no tener hijos.

Su discurso buscaba ofrecer a activistas del partido una renovación de los valores conservadores, haciendo al mismo tiempo nuevas promesas a una generación más joven.

“Este es el conservadurismo en el que creo, un conservadurismo de justicia y oportunidad para todos, un conservadurismo que mantiene vivo el juego británico para una nueva generación”, declaró May ante una multitud que la vitoreaba.

May, que fue abrazada cálidamente por su esposo en el escenario tras concluir su discurso, se rió posteriormente de su ataque de tos al publicar en Twitter una imagen de pastillas y medicamentos para la tos junto a una copia en papel de su discurso y su maletín de primera ministra. May