MADRID (Reuters) - El Tribunal Supremo de España retiró el martes la orden de arresto internacional contra el expresidente catalán Carles Puigdemont, autoexiliado en Bélgica tras un referendo de independencia ilegal, en un intento por devolver el caso solamente a la jurisdicción española.
Puigdemont y cuatro miembros de su gabinete se fueron a Bélgica cuando Madrid impuso el control directo sobre la rica región del noreste español, tras una declaración de independencia en el Parlamento catalán el 27 de octubre que fue considerada ilegal por los tribunales españoles.
La decisión de retirar la orden de arresto deja a Puigdemont sin un escenario legal internacional para seguir adelante con su campaña independentista. Asimismo, es probable que sea detenido si regresa a España, pendiente de una investigación por cargos de sedición, rebelión, malversación de fondos públicos y desobediencia.
La retirada de la orden de arresto deja al sistema legal belga fuera del caso, evitando lo que podrían haber sido meses de recursos y apelaciones en torno a su extradición en las cortes belgas.
El juez Pablo Llarena dijo que es importante que el proceso sea manejado por una única entidad legal, para asegurar un tratamiento en igualdad.
El fiscal belga dijo que las autoridades están analizando la situación y el abogado de Puigdemont, Paul Bekaert, aseguró que el proceso legal en Bélgica no ha concluido.
El pulso entre Madrid y los secesionistas catalanes ha dañado a la economía española y empujó a miles de empresas a cambiar su sede legal fuera de Cataluña, responsable de una quinta parte de la economía del país ibérico.
El martes comenzó la campaña para las elecciones regionales catalanas del 21 de diciembre, convocadas por Madrid en un intento por resolver la crisis. Los sondeos muestran una gran igualdad entre las fuerzas que buscan escindirse de España y las que apuestan por seguir unidos. España