Davos (Suiza) (EuroEFE).- La primera ministra británica, Theresa May, defendió este jueves en la ciudad suiza de Davos la necesidad de reformar la regulación comercial internacional y retirar barreras al libre intercambio de bienes y servicios entre países.
En su intervención en el Foro Económico Mundial, al que acude por segunda vez como jefa del Gobierno británico, criticó que en demasiadas ocasiones la "retórica" en favor del libre comercio no se corresponde con "acciones" reales.
"No podemos tirar en distintas direcciones", afirmó May en una intervención en la que resaltó asimismo la importancia de la economía digital y el avance de tecnologías como la inteligencia artificial para el crecimiento global.
La mandataria británica, que se reunió hoy con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, asiste a Davos en un momento en el que su Gobierno negocia con Bruselas los términos de la futura relación del Reino Unido con la Unión Europea (UE), bloque que abandonará previsiblemente en marzo de 2019.
Londres ha insistido en los últimos meses en su deseo de firmar un amplio acuerdo comercial con la UE que incluya tanto bienes como servicios y que facilite, en particular, el acceso al mercado único a las firmas financieras con sede en el Reino Unido.
En el Foro Económico, May subrayó su deseo de convertir al Reino Unido en un "defensor global" del libre comercio una vez rompa sus lazos con el club comunitario e insistió en sus planes de firmar nuevos acuerdos bilaterales en todo el mundo.
Ante las numerosas negociaciones comerciales en las que Reino Unido prevé estar involucrado en los próximos años, la política conservadora instó a la Organización Mundial de Comercio (OMC) a modernizar sus normas, a fin de mantenerse en línea con el "ritmo del desarrollo de la economía global"
May pidió nuevas regulaciones que faciliten la economía digital y el comercio a través de internet, que "ha alcanzado un papel central en las vidas de miles de millones de personas en todo el mundo", afirmó.
Reclamó asimismo que se aceleren las negociaciones entre más de veinte países de la OMC con el objetivo de firmar el Acuerdo para Comercio de Servicios (TiSA, en sus siglas en inglés), un marco regulatorio para facilitar la apertura de mercados en materias como servicios financieros, telecomunicaciones y desplazamiento temporal de trabajadores para la prestación de servicios.
Impulsar la cooperación entre gobiernos
"Todos los países deben apoyar y contribuir a dar forma a normas en favor del comercio y las inversiones libres y justas", consideró la dirigente británica, para quien el continuo crecimiento de la economía mundial pasa por que la comunidad internacional apoye el progreso de las naciones en desarrollo.
"Debemos asegurarnos de que nadie queda atrás en este salto hacia delante", dijo May, quien recalcó que el Reino Unido aspira a convertirse en un líder tecnológico global una vez abandone la UE.
Entre sus planes, la primera ministra subrayó su deseo de aprovechar las oportunidades que se abren en el campo de la inteligencia artificial.
Su estrategia pasa por fomentar las colaboraciones entre el sector público y el privado, a fin de "aprovechar las oportunidades que brinda la tecnología para crear puestos de trabajo de alta calidad y bien pagados".
Al abordar el futuro del sector tecnológico, May dedicó varios minutos de su intervención a prevenir sobre los riesgos asociados a esos avances, en particular la divulgación a través de internet de contenidos "nocivos" como propaganda terrorista y noticias falsas.
En ese sentido, reclamó a los grandes inversores y accionistas de empresas tecnológicas que ejerzan presión para lograr que las firmas aumenten los recursos que dedican a establecer mecanismos de protección contra ese tipo de contenidos.
"Por ejemplo, este mes un grupo de accionistas pidieron a Facebook y Twitter que fueran más abiertos sobre (sus medidas contra) el acoso sexual, las noticias falsas, las discursos que fomentan el odio y otras formas de abuso que se producen en sus plataformas", comentó May.
La jefa de Gobierno admitió que el sector ha dado pasos en los últimos años para acelerar los procesos que permiten filtrar la información que aparece en las redes sociales y otras plataformas, pero consideró que hay que ir "más allá" y establecer mecanismos que retiren ese material de forma "automática".
"Debemos renovar nuestro compromiso para fomentar la cooperación entre gobiernos, empresas, inversores y el conjunto de la sociedad", concluyó May. euroefe