WEST PALM BEACH, EEUU (Reuters) - El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, insistió el domingo en que “no soy racista” en respuesta a los reportes que sostienen que describió a los inmigrantes de Haití y las naciones africanas como procedentes de “países de mierda”.
Trump también afirmó que está listo y dispuesto para llegar a un acuerdo que permita proteger de la deportación a los inmigrantes ilegales que ingresaron a Estados Unidos cuando eran niños, pero dijo que no cree que los demócratas quieran un acuerdo.
El domingo más temprano escribió en Twitter que cree que el programa que protege actualmente a esos inmigrantes, conocido como Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por su sigla en inglés), “probablemente” será descontinuado.
El debate sobre la política de inmigración se hizo más áspero después de que reportes de prensa revelaron el jueves que el mandatario republicano utilizó la expresión “países de mierda” para describir a Haití y las naciones africanas en una reunión privada con legisladores.
Los comentarios provocaron severas recriminaciones de demócratas y republicanos, y algunos críticos acusaron a Trump de racismo, en momentos en que continúan las negociaciones bipartidistas en el Congreso para buscar un compromiso que permita rescatar el DACA.
Cuando un periodista de Florida le preguntó si era racista, Trump respondió: “No, no soy racista. Soy la persona menos racista que has entrevistado”.
Trump ha amenazado con terminar el DACA, pero pareció dejar la puerta abierta a un acuerdo cuando dijo a la prensa antes de una cena el domingo por la noche: “Estamos listos, dispuestos y tenemos la capacidad de hacer un acuerdo sobre el DACA, pero no creo los demócratas quieren hacer un pacto (...) Los demócratas son los que no van a llegar a un acuerdo”.
Trump escribió más temprano en un tuit: “Probablemente el DACA está muerto porque los demócratas en realidad no lo quieren, solo quieren hablar y quitarles el dinero que tanto necesitan nuestras Fuerzas Armadas”. Trump