lunes, 21 de mayo de 2018

El nacionalismo escocés reaviva la independencia con su nuevo plan económico

Edimburgo (Reino Unido), 21 may (EFE).- El debate sobre la celebración de un nuevo referéndum de independencia en Escocia se reactivará en los próximos días, cuando el Partido Nacionalista Escocés (SNP) publicará un informe sobre la política económica que se podría implantar en caso de romper sus lazos con el Reino Unido.

Así lo ha anunciado la ministra principal escocesa y líder del SNP, Nicola Sturgeon (Foto), en una entrevista con la cadena ITV, en la que adelantó que la publicación de este documento pondrá de nuevo sobre la mesa la convocatoria de la citada consulta.

Sturgeon reiteró que el referéndum se debería plantear cuando se conozca de forma más precisa el acuerdo sobre el "brexit" entre el Reino Unido y la Unión Europea (UE).

Además, la dirigente nacionalista criticó en Twitter que el Partido Conservador, que ostenta el Gobierno británico, se oponga a un "debate en el que se trate la cuestión de la independencia".

"En las próximas dos semanas, supongo, reiniciaremos un debate sobre por qué la independencia de Escocia es una oportunidad y cuáles son esas oportunidades", afirmó.

Se espera que las negociaciones de retirada del Reino Unido del bloque comunitario estén más avanzadas a partir del próximo otoño, ya que la salida de la UE está prevista para el 29 de marzo de 2019.

"Una vez que obtengamos algo de claridad, que esperamos que sea en el otoño de este año, sobre el resultado del 'brexit' y la futura relación entre el Reino Unido y la UE, consideraré nuevamente esta cuestión sobre el momento de un referéndum de independencia", apuntó.

La prensa escocesa recoge hoy que el documento, elaborado por el comité de crecimiento económico del SNP, analiza los posibles escenarios económicos de una Escocia independiente en base al crecimiento y la política fiscal y monetaria.

Algunos medios señalan que contiene la propuesta de crear una moneda propia para Escocia, un asunto que centró la atención en la campaña del referéndum de 2014, cuando el 55 % votó a favor de permanecer en el Reino Unido frente al 45 % que apoyó la separación.

El objetivo de los nacionalistas es usar estos planteamientos para contraponerlos a las posibles consecuencias del "brexit" que, según un informe del Gobierno británico, conllevaría un descenso de entre un 2,5 % y un 9 % del PIB escocés.

La líder de los conservadores escoceses, Ruth Davidson, reprochó a Sturgeon que quiera convocar un segundo referéndum a pesar de haber perdido el plebiscito de 2014.

"La gente está cansada después de más de una década de gobierno del SNP, en la que las políticas de quejas han prevalecido sobre las de escuelas, la economía y la construcción de un servicio de salud sostenible", indicó.

El líder del Partido Laborista de Escocia, Richard Leonard, sostuvo que "la transformación económica y social que Escocia necesita" no llegará de la mano de "otro referéndum" y añadió que las propuestas económicas que plantea el SNP son "una receta para la inestabilidad" de la economía. EFE