Moscú, 18 may (EFE).- El presidente ruso, Vladímir Putin, y la canciller alemana, Angela Merkel, apuntalaron hoy la supervivencia del acuerdo nuclear con Irán, en la cuerda floja tras la salida de Estados Unidos, en una reunión donde exhibieron otras coincidencias frente a Washington.
"Hemos hablado acerca de la compleja situación que se ha creado con la salida de Estados Unidos del pacto nuclear iraní. Este acuerdo no es perfecto, pero es mejor que no tener ninguno", dijo Merkel en la conferencia de prensa conjunta que ofrecieron tras su reunión en la ciudad rusa de Sochi (mar Negro).
Recordó que "Alemania, Reino Unido y Francia (los países europeos firmantes del pacto junto con Rusia, China y EEUU) y todos nuestros colegas en la Unión Europea apoyamos este acuerdo y seguiremos apoyándolo en el futuro".
Por ello, agregó Merkel, "deben seguir las negociaciones con Irán acerca de esto. Como europeos estamos teniendo contactos con Irán, hablando de la necesidad de que siga comprometido con este acuerdo, porque creo que garantiza más control y seguridad".
Putin también confirmó que habían hablado del acuerdo nuclear con Irán en la primera reunión cara a cara que mantenían los dos mandatarios en el último año.
Rusia coincide con la UE en la necesidad de preservar el pacto alcanzado entre Irán y el Grupo 5+1 (los 5 miembros del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania) para poner bajo control el programa nuclear iraní a cambio de levantar las sanciones a Teherán, a pesar del abandono unilateral decidido por el presidente de EEUU, Donald Trump.
Pero no acabaron ahí las coincidencias, ya que Putin y Merkel defendieron el proyecto conjunto del gasoducto Nord Stream II, que suministrará gas ruso a Alemania a través del mar Báltico, una iniciativa a la que se opone Washington, que amenaza con sanciones.
Ambos acordaron, además, mantener el tránsito de gas a través de Ucrania una vez haya sido tendido el gasoducto Nord Stream II el próximo año.
"Insisto: los suministros (a través de territorio ucraniano) continuarán si son rentables económicamente hablando y es algo que conviene a las partes implicadas", dijo Putin, antes de asegurar que Rusia está "dispuesta" a entablar negociaciones con Kiev.
Según Putin, aunque Kiev no desea mantener relaciones con Moscú, "quiere seguir recibiendo unos 2.000-3.000 millones de dólares anuales por el tránsito".
Y EEUU, que considera que el Nord Stream II es una amenaza para la seguridad energética de Europa, quiere que "nosotros le demos a Ucrania nuestro dinerito", subrayó.
"Quiero recordarles que nosotros siempre consideramos el Nord Stream II como un proyecto exclusivamente económico. Y siempre lo mantuvimos al margen de cualquier proceso político", subrayó.
Merkel se mostró "convencida" de que, "después del tendido de Nord Stream II, Ucrania mantendrá su papel como país de tránsito".
"Esto tiene una importancia estratégica y Alemania está dispuesta a jugar su papel. Hay que pensar también en ofrecer garantías a Ucrania", señaló.
A principios de año, el entonces secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson, aseguró en Polonia que el Nord Stream II "socava la seguridad y la estabilidad energética de Europa, a la vez que da a Rusia otra herramienta más para politizar el sector energético".
Y en las últimas semanas Washington insinuó que podría imponer sanciones a Berlín y al resto de países involucrados en el tendido del gasoducto.
Los países bálticos, los escandinavos y gran parte de los socios comunitarios de Europa del este han criticado este proyecto, que la propia Comisión Europea (CE) considera perjudicial, aunque Putin insistió hoy en que puede suministrar gas también a otros países, además de Alemania.
La entrevista en Sochi, en la que el jefe del Kremlin obsequió a Merkel con un gran ramo de flores blancas, mostró así un raro acercamiento entre los líderes de dos países enfrentados los últimos años por otros asuntos de la agenda internacional, como la crisis de Ucrania y el conflicto en Siria, además del reciente envenenamiento en Reino Unido del exespía ruso Serguéi Skripal.
Merkel le prometió a Putin que hablará con el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, sobre la detención en Kiev del jefe de la agencia estatal rusa RIA Nóvosti en ese país, Kiril Vishinski, acusado de alta traición.
"Yo desde luego comentaré con el presidente ucraniano mi viaje de hoy y le mencionaré este caso", dijo Merkel acerca de una detención que Putin calificó de "algo sin precedentes". Mundo