LONDRES/BRUSELAS (Reuters) - La debilitada primera ministra británica, Theresa May, viajó a Bruselas el jueves para presionar a los líderes europeos en busca de apoyos tras sobrevivir a un motín parlamentario que puso de relieve el punto muerto en el que se encuentra el Brexit.
El miércoles, May obtuvo el respaldo de 200 diputados del Partido Conservador, mientras que 117 votaron en contra, en una moción de censura que profundizó las divisiones a pocas semanas de que venza el plazo para que el Parlamento apruebe un acuerdo que evite una salida desordenada de la Unión Europea.
El ministro para el Brexit, Stephen Barclay, dijo que May -quien lleva meses viajando por Europa y asistirá a una cumbre de la UE hasta el mediodía del viernes- buscará garantías de que Reino Unido no estará atada a la UE de forma indefinida tras el Brexit, como temen los críticos de su partido.
“Gracias al mandato que obtuvo anoche por parte del partido parlamentario, la primera ministra tiene ahora tiempo para mantener esas conversaciones con los colegas europeos”, afirmó, agregando que el contenido del viaje era “positivo”.
No obstante, no se incluyó ninguna votación sobre el Brexit en el cronograma parlamentario de la próxima semana, antes de la Navidad, y no parece que los líderes europeos vayan a ofrecer un respaldo inmediato. Un borrador de la declaración del encuentro de la UE se limitaba a indicar que están dispuestos a examinar si aún se pueden ofrecer garantías adicionales.
El documento de seis puntos UE indicaba que las eventuales nuevas garantías no “cambiarían ni irían en contradicción” con el acuerdo de salida firmado el mes pasado, después de dos años de negociaciones.
May canceló esta semana una votación parlamentaria sobre su acuerdo, que establece estrechos lazos futuros con el bloque, tras reconocer que iba a sufrir un dura derrota en la Cámara de los Comunes. May prometió una nueva votación antes del 21 de enero, pero se enfrenta a una ardua tarea para convencer a los diputados escépticos.
Con el telón de fondo del 29 de marzo, fecha prevista para la salida del Reino Unido, además de un Brexit con acuerdo se han abierto otras posibilidades, como una salida desordenada -es decir, sin acuerdo- o, incluso, otro referendo.
Foto: British Prime Minister Theresa May arrives at a European Union leaders summit in Brussels, Belgium December 13, 2018. REUTERS/Francois Lenoir Reuters