LONDRES (Reuters) - La primera ministra británica, Theresa May, se reunirá el miércoles con el líder de la oposición, el laborista Jeremy Corbyn, con el fin de buscar un acuerdo para el Brexit, una apuesta con la que la mandataria podría lograr el ansiado visto bueno del Parlamento a una salida acordada de la Unión Europea, aunque también romper su partido.
Después de que los diputados rechazaran tres veces el acuerdo del Gobierno de May con Bruselas, la primera ministra dijo el martes que se contactará con Corbyn para intentar superar el punto muerto.
Aunque en un principio Reino Unido iba a abandonar la UE el viernes pasado, tres años después de que los británicos respaldaron una salida del bloque en un referéndum, aún no está claro cómo, cuándo o incluso si lo hará.
May no pudo persuadir a un grupo de diputados euroescépticos de su propio partido a que respaldaran el acuerdo de divorcio que firmó con la UE porque no supondría una ruptura clara con Europa.
Con la decisión de May de solicitar otra prórroga breve respecto a la fecha actual del Brexit del 12 de abril para negociar el apoyo del Partido Laborista, que busca una unión aduanera con la UE, parece más probable un Brexit “suave”, en el que se mantendría a la economía británica estrechamente alineada con el mayor bloque comercial del mundo.
La libra subía el miércoles ante las esperanzas de un Brexit “más suave”, tocando su nivel más alto desde el 28 de marzo.
“Personalmente creo que una unión aduanera es altamente indeseable”, dijo el secretario del Brexit, Stephen Barclay, a la radio de la BBC. “Es lamentable que lo que hemos estado diciendo durante varios meses se cumpla ahora, pero esa es la lógica implacable de no haber respaldado el acuerdo de la primera ministra”.
La decisión de May de acercarse a Corbyn, un experimentado político socialista denostado por muchos conservadores y al que la propia May ha considerado inadecuado para encargarse del gobierno del país, aún plantea muchas interrogantes.
May no explicó por cuánto tiempo se prolongará la nueva demora en el Brexit y simplemente señaló que debería ser “lo más breve posible y que termine cuando tengamos un acuerdo”. La mandataria ha dicho repetidamente que no quiere una extensión que obligue a Reino Unido a participar en las elecciones al Parlamento Europeo del 23 de mayo.
El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, dijo que el bloque debería ser paciente con Reino Unido mientras May intenta encontrar un camino para salir del atolladero, pero destacó que no está seguro qué pensarán los líderes europeos de su petición.
De no haber cambios sustanciales, Reino Unido saldrá de la UE el 12 de abril sin un acuerdo, un escenario que sería del agrado para numerosos diputados conservadores pero que en opinión del mundo empresarial podría causar caos y un gran perjuicio económico.
Un grupo de legisladores británicos de varios partidos intentará el miércoles que se apruebe una legislación en el Parlamento para hacer imposible un Brexit desordenado. Reuters