Londres (EuroEFE).- El primer ministro británico, Boris Johnson, trabaja este viernes contrarreloj para tratar de convencer a los diputados de que apoyen el acuerdo del “brexit” sellado con la Unión Europea (UE), que será votado mañana en el Parlamento.
El jefe del Gobierno conservador está en una situación muy precaria en la Cámara de los Comunes, donde no tiene mayoría y dependerá mañana de los votos de otras formaciones y de los más de veinte parlamentarios “tories” que expulsó por no apoyar una salida “dura” (sin pacto) de la UE.
La Cámara de los Comunes celebrará este sábado una sesión extraordinaria (08.30 GMT), la primera vez que se convoca a los diputados un sábado desde la guerra de las Malvinas frente a Argentina en 1982.
El ministro de Exteriores, Dominic Raab, afirmó este viernes que el acuerdo es “ganador” para su país porque permitirá “recuperar el control de nuestras leyes, nuestras fronteras y nuestro dinero”.
“Es un acuerdo decisivo para Irlanda del Norte” pues “no sólo se queda en el territorio aduanero del Reino Unido pero sin fricciones en el acceso al mercado único”, dijo a la BBC.
“Tenemos una buena oportunidad ahora de cumplir con el referéndum del brexit”, agregó Raab, e insistió en que seguirá defendiendo en las próximas horas los beneficios de lo negociado.
Las cuentas de Johnson
El primer ministro necesita 320 votos para sacar adelante su pacto, pero apenas cuenta con 288 diputados, mientras que los parlamentarios del DUP, la mayoría de laboristas, los nacionalistas escoceses del SNP y los liberaldemócratas, además de algunos independientes, han avanzado que votarán en contra.
Ante este panorama y dada la fragmentación de la cámara baja, se espera que Johnson dedique la jornada de este viernes a conseguir el respaldo de otras formaciones, especialmente de los laboristas procedentes de circunscripciones británicas que votaron por el “brexit” en el referéndum europeo celebrado en junio de 2016.
Está previsto que la sesión parlamentaria de mañana empiece sobre las 08.30 GMT y se estima que se presentarán enmiendas, posiblemente una sobre la posibilidad de someter el acuerdo de salida a una votación de confirmación por parte del electorado.
El primer ministro defendió ayer que “todo el Reino Unido” saldrá de la unión aduanera con el nuevo pacto del “brexit” y que su país podrá alcanzar pactos comerciales con “el mundo”. EUROEFE EURACTIV