Viena, 30 may (EFE).- La jueza Brigitte Bierlein se ha convertido este jueves en la primera mujer de la historia que accede a la jefatura del Gobierno de Austria, designada por el presidente del país, Alexander van der Bellen, para encabezar un Ejecutivo de transición tras las turbulencias causadas por el "caso Ibiza"
Bierlein, presidenta del Tribunal Constitucional desde hace dos años, "será la primera canciller federal de la República de Austria", anunció el jefe del Estado a la prensa en el antiguo palacio imperial de Viena, sede de la presidencia.
Van der Bellen recordó que, tras la moción de censura que el lunes tumbó al entonces canciller Sebastian Kurz y su gabinete provisional formado por democristianos y expertos, su prioridad era encontrar una persona capaz de "dirigir el destino de la República hacia dentro y hacia fuera".
"¿Y quién podría ser más adecuada que la máxima guardiana de la Constitución Federal de Austria?", preguntó el presidente al justificar su decisión, que tomó tras mantener consultas con los líderes de todos los partidos con representación parlamentaria.
Por su parte, Bierlein informó de que ya ha dado los primeros pasos para formar un gabinete de "especialistas experimentados" en la administración pública, como el jurista Clemens Jabloner y el diplomático Alexander Schallenberg, que ocuparán la vicecancillería y la cartera de Exteriores y Asuntos Europeos, respectivamente.
El Ejecutivo debe permanecer en el poder hasta la formación de un nuevo Gobierno surgido de las urnas en septiembre próximo, cuando se celebrarán elecciones anticipadas.
De 69 años y sin afiliación política, la experta en derecho constitucional sustituye así al democristiano Kurz tras las turbulencias desatadas por la publicación, el pasado día 17, de un vídeo que comprometía al entonces vicecanciller, el ultranacionalista Heinz-Christian Strache.
La controvertida coalición derechista, formada a finales de 2017 por el partido popular ÖVP de Kurz y el FPÖ que lideraba entonces Strache, se mantuvo apenas 525 días en el poder y estalló por el escándalo causado por la difusión de las imágenes grabadas con cámara oculta en Ibiza (España) que comprometían al vicecanciller.
En el vídeo, filmado en julio de 2017 y publicado por dos medios alemanes a dos días de las elecciones europeas, Strache se mostraba dispuesto a adjudicar contratos públicos a una supuesta millonaria rusa a cambio de ayudas ilícitas a su partido.
El "caso Ibiza" provocó su dimisión y el cese forzado del ministro del Interior, el ultra Herbert Kickl, así como el abandono voluntario del Gobierno del resto de miembros del FPÖ.
Había terminado así el "experimento" de Kurz de gobernar con los ultranacionalistas y euroescépticos, tres años y medio antes de la fecha en que se preveía el fin del mandato de la coalición.
Kurz nombró a "expertos" en sustitución de los ministros dimisionarios, pero su gabinete había perdido la mayoría en el Parlamento que, por primera vez en la historia de esta república, provocó la caída de un Gobierno al retirarle la confianza.
Así las cosas, en menos de dos semanas Austria ha vivido cuatro situaciones inéditas para el país: el primer cese de un ministro, la primera moción de censura exitosa, la primera mujer canciller y el primer Gobierno de tecnócratas.
"Esto no es cotidiano, pero es democracia y es una democracia fuerte", aseguró hoy el presidente.
Bierlein, que será nombrada oficialmente en cuanto presente su gabinete completo, cuenta ya con el apoyo de todos los partidos políticos, incluidos los de la oposición, a pesar de ser conservadora y considerada cercana tanto a los populares como a los ultras.
Para Kurz, su sucesora es "una personalidad íntegra, experimentada y extraordinariamente competente", mientras que Pamela Rendi-Wagner, líder del Partido Socialdemócrata, expresó este jueves su satisfacción por el hecho de que una mujer sea canciller federal. Mundo