viernes, 17 de octubre de 2014

Nuevos enfrentamientos en Hong Kong tras desmantelamiento de barricadas

HONG KONG (Reuters) - La policía anti disturbios de Hong Kong utilizó gas pimienta y se enfrentó a manifestantes a favor de la democracia el viernes por la tarde, tras desmantelar una extensa zona de protesta en el centro financiero controlado por China.

Una multitud de manifestantes se dirigió hacia el congestionado distrito de Mong Kok luego del trabajo y el horario escolar en la tarde del viernes, para intentar recuperar partes de una zona que la policía había despejado en una sorpresiva operación en la madrugada.

Cientos de manifestantes intentaron atravesar las líneas policiales y utilizaron paraguas abiertos para protegerse del gas pimienta. En el tumulto, la policía usó bastones y empujó violentamente a los activistas.

Los manifestantes, liderados por una inquieta generación de estudiantes, exigen a los gobernantes del Partido Comunista Chino que cumplan sus promesas constitucionales de garantizar democracia plena a la ex colonia británica, que se reintegró a China en 1997.

Antes del amanecer del viernes, cientos de policías realizaron la mayor operación hasta la fecha contra el campamento de los manifestantes prodemocracia, cargando contra los activistas que controlaban una intersección en una de sus principales zonas de protesta desde hace más de tres semanas.

La operación en Mong Kok, el núcleo del movimiento de desobediencia civil, próximo a los edificios del gobierno, se produjo cuando los manifestantes dormían en decenas de tiendas de campaña levantadas bajo gigantescas lonas de color azul.

La redada puso a prueba a la fuerza de 28.000 policías de esta ciudad bajo control chino, que ya recibió críticas por sus agresivas operaciones previas con gases lacrimógenos y con golpes a un manifestante esposado el miércoles.

Los ciudadanos fueron sorprendidos por 800 agentes que llegaron a la intersección desde cuatro direcciones con cascos, escudos y bastones. Muchos se retiraron sin resistirse.

En la tarde, con más manifestantes llegando a la zona, las autoridades cerraron una cercana estación de metro, informaron los medios.

La policía ondeó banderas rojas, advirtiendo a los manifestantes que no cargaran en su contra.

En agosto, Pekín ofreció a los ciudadanos de Hong Kong la posibilidad de elegir a su próximo líder en 2017, pero solo permitió que dos de los tres candidatos se presentaran tras recibir el apoyo de un "comité nominador" de 1.200 personas repleto de leales a Pekín.

Los manifestantes lo califican como una democracia "falsa" al estilo chino y exigen a Pekín nominaciones abiertas.

En el momento más álgido de las protestas, unas 100.000 personas tomaron las calles, en uno de los desafíos políticos más grandes para Pekín desde que aplastó las manifestaciones prodemocracia en la Plaza Tiananmen de la capital china en 1989.