MADRID (Reuters) - España denunciará al presidente de Cataluña por "desobediencia y deshonestidad" después de que desafió una prohibición de los tribunales de no celebrar una votación sobre la secesión de esta región, dijeron el miércoles fuentes judiciales.
Las fuentes judiciales dijeron que el texto de la demanda está siendo ajustado y es probable que se presente en la tarde del miércoles o el jueves.
Cataluña realizó el domingo una consulta simbólica en la que 1,8 millones de catalanes (alrededor de un 30 por ciento de los que podían opinar) se mostraron favorables a un proceso de independencia.
El caso contra Artur Mas podría prohibir hipotéticamente al presidente catalán presentarse a las próximas elecciones regionales, previstas en principio para finales de 2016.
En una rueda de prensa celebrada este miércoles, el presidente español, Mariano Rajoy, aseguró estar comprometido con el diálogo tras dos años de tensiones sobre la relación de Cataluña con España.
No obstante, dejó claro que solo lo hará dentro del marco de la legalidad.
"Nunca me he negado al diálogo (...) creo en el diálogo para resolver problemas políticos, es un deber irrenunciable", dijo, añadiendo que "todo el diálogo en el que yo intervenga ha de enmarcarse en los límites que establece la Constitución".
En este sentido, animó a Mas a proponer al Parlamento una reforma de la Constitución de 1978, aunque adelantó que su formación, el gobernante Partido Popular, votará en contra de un texto que amenace la unidad del país.
"Si lo que desea es modificar la Constitución (...) tiene todo el derecho, debería haber comenzado por ahí", dijo Rajoy, añadiendo que "nunca me he negado a una reforma".
Sin embargo, aclaró que se opondrá a cualquier reforma constitucional "que liquide la soberanía nacional y mi partido también".
El líder catalán, que calificó de éxito la consulta del domingo, mandó una misiva a Rajoy ofreciéndole fijar las condiciones para un diálogo permanente que permitiese avanzar hacia una próxima consulta vinculante en Cataluña.
Rajoy afirmó que "no quisiera que nadie se llamase a engaño ... (Mas quiere) imponerme la celebración de un referéndum de verdad (...) y ya adelanto que eso no puede ser (...) lo que era ilegal hace un año, sigue siéndolo hoy".
El jefe de gobierno español calificó de "fracaso" la consulta y apeló a la decisión de más dos tercios de los catalanes de no respaldar el proyecto.
"Ha sido un profundo fracaso del proyecto independentista, con todo el respeto hacia las personas que participaron", dijo Rajoy, para añadir que el resultado de la consulta permite constatar "que en Cataluña hay muchos más catalanes que independentistas y que Cataluña es muy plural".