2 de febrero, 2015 — La directora general de la UNESCO, Irina Bokova, y el Consejo de Seguridad de la ONU condenaron el asesinato del periodista japonés, Kenji Goto, cometido por militantes del grupo extremista ISIS el sábado pasado.
La titular de UNESCO urgió a los trabajadores de los medios en Siria e Iraq a tomar todas las precauciones posibles para garantizar su seguridad.
“Kenji Goto era un experimentado periodista dedicado a mostrar el sufrimiento que el conflicto impone a los ciudadanos”, dijo Bokova. Y agregó: “Su asesinato a sangre fría es un acto vil y lo condeno en los términos más enérgicos posibles”.
Por su parte, el Consejo de Seguridad caracterizó el crimen como un acto “monstruoso y cobarde”. A través de un comunicado señaló que este asesinato es un nuevo recordatorio de los riesgos que enfrentan todos los días los periodistas en Siria, así como de la brutalidad del grupo ISIS, responsable de miles de abusos contra los pueblos de Siria e Iraq.
De 47 años de edad, Kenji Goto había trabajado anteriormente en Afganistán y Siria para varios medios de comunicación japoneses. Viajó a Siria en octubre pasado y poco después desapareció. El sábado pasado el grupo extremista en Iraq publicó en internet un video mostrando su decapitación.