18 de abril, 2015 — El subsecretario general de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Iván Šimonovic, condenó este sábado en los términos más enérgicos el brutal atentado suicida en Jalalabad, Afganistán, ocurrido en coincidencia con su visita oficial.
También lamentó profundamente la táctica indiscriminada del ataque que fue dirigido a la población civil.
El atentado ocurrió cuando varias personas estaban haciendo cola frente a un banco en el centro de la ciudad para cobrar sus salarios, incluyendo a empleados de gobierno y personal de las fuerzas de seguridad.
Al menos 35 personas habrían muerto y más de un centenar resultaron heridas, incluyendo niños, según datos preliminares.
En un comunicado, Šimonovic indicó que inmediatamente tras el incidente se reunió con el gobernador de la ciudad, el jefe de la policía local y el comandante de las fuerzas militares y expresó las condolencias de Naciones Unidas a las víctimas y familias afectadas.