La extensión de seis meses fue acordada por los embajadores de las 28 naciones de la UE, reunidas en Bruselas.
Se espera que la ratificación de la extensión por seis meses sea una mera formalidad en un encuentro de ministros de Relaciones Exteriores de la UE en Luxemburgo que se celebrará el lunes. El proceso significa que no habrá una moción formal sobre Rusia en la cumbre que celebrarán los líderes de la UE en Bruselas a fines de la próxima semana.
Los medios rusos citaron al ministro de Finanzas, Anton Siluanov, afirmando que Moscú ya había previsto en sus planes económicos una ampliación de las medidas.
Las sanciones sobre los sectores energético, financiero y de defensa de Rusia fueron impuestas por un año en julio del 2014 en respuesta a la anexión por parte de Moscú de la región ucraniana de Crimea, y a lo que la UE calificó como un respaldo de Rusia a los separatistas en el este ucraniano.
Rusia respondió prohibiendo la importación de la mayor parte de los alimentos occidentales. Estados Unidos también impuso sanciones a Moscú.
La extensión de las medidas de la UE se produce en un momento en que se reactivaron los combates entre separatistas prorrusos y tropas ucranianas en el este de Ucrania, en violación del acuerdo de alto el fuego firmado en febrero en Minsk, y cuando Rusia y Occidente volvieron a subir el tono de sus recriminaciones.
La decisión mantiene la unidad occidental en las sanciones a Rusia, a pesar de las reservas abiertamente expresadas por algunos miembros de la UE sobre la sensatez de imponer sanciones sobre el mayor proveedor energético del bloque.