WASHINGTON (Reuters) - El presidente estadounidense, Barack Obama, brindó un emotivo discurso el martes en defensa del plan de su Gobierno de aumentar los controles sobre los compradores de armas de fuego a través de internet y en armerías, y señaló que las excepciones actuales no tienen sentido.
En la Casa Blanca, el mandatario pidió a sus compatriotas que voten por el candidato que más haga para impedir la violencia con armas de fuego en las elecciones de este año, y destacó que la nueva normativa "no es un complot para sacarle las armas a todos".
"Creo que podemos hallar formas de reducir la violencia armada de manera consistente con la Segunda Enmienda", dijo Obama, quien estuvo acompañado de familiares de personas que murieron en tiroteos, en referencia al derecho constitucional a la tenencia de armas en Estados Unidos.
Obama ha dicho en reiteradas ocasiones que el momento más difícil de su presidencia fue lidiar con la matanza de 20 niños y seis adultos en una escuela en Newtown, Connecticut, en diciembre de 2012.
"Cada vez que pienso en esos niños enloquezco", dijo Obama con lágrimas en los ojos. "Eso me cambió, ese día", agregó tras ser presentado por Mark Barden, cuyo hijo de 7 años murió en el hecho.
Luego de esa tragedia, el mandatario demócrata no logró que el Congreso endureciera las leyes sobre armas. Culpó a los legisladores por dejarse esclavizar por la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por su sigla en inglés).
Obama dio a conocer detalles de la acción ejecutiva que tomará su Gobierno para requerir que más cantidad de gente que compre armas necesite licencias y pase por un mayor número de controles de antecedentes.
Con estos cambios, la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por su sigla en inglés) emitirá lineamientos para achicar las excepciones a un sistema que requiere que los vendedores de armas acudan al FBI para determinar si un comprador tiene registros criminales, fue acusado o tiene problemas mentales que sean impedimento para realizar la transacción. Reuters