Los Ángeles, 6 de junio, 2016 (Reuters) - Hillary Clinton está iniciando una semana clave en sus esfuerzos para asegurar la nominación del Partido Demócrata para las elecciones presidenciales en Estados Unidos, en momentos en que sus aspiraciones se ven impulsadas por sus ataques contra Donald Trump, su más probable rival en los comicios del 8 de noviembre.
Seis estados —California, Montana, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Nueva Jersey y Nuevo México— realizarán primarias el martes.
El equipo de campaña de Clinton espera que la exprimera dama pueda asegurar la nominación con un triunfo en Nueva Jersey, desviando la atención de la dura batalla en California ante su rival Bernie Sanders en las primarias demócratas. Clinton podría declararse como la abanderada del partido gobernante antes de que cierren las urnas en California.
En este estado, el mayor premio electoral, Clinton tuvo alguna vez una ventaja considerable sobre Sanders, pero las encuestas en los últimos días muestran un empate técnico entre ambos precandidatos.
Una derrota ante Sanders en California no descarrilaría el camino de Clinton para la nominación, pero podría impulsar al senador por Vermont y sus partidarios para llevar la batalla hasta la convención del partido en julio. Una traspié podría también reforzar los argumentos de Trump, el virtual nominado del Partido Republicano, que apuntan a que Clinton es una candidata débil.
Clinton hizo campaña el domingo en Oakland, Vallejo y Sacramento y se espera que el lunes esté en el área de Los Ángeles.
En un discurso en San Diego la semana pasada, Clinton atacó a Trump, un magnate inmobiliario y figura de un reality show, por sus credenciales en materia de seguridad nacional, argumentando que carece del temperamento y el conocimiento necesarios para desarrollar lazos con las naciones extranjeras.
Clinton, una exsecretaria de Estado, dijo que sería peligroso que Trump estuviera a cargo del arsenal nuclear de Estados Unidos. El discurso fue elogiado por los demócratas, que dijeron que podría impulsar los esfuerzos de la esposa del expresidente Bill Clinton de cara a las elecciones generales. Incluso algunos republicanos dijeron que el discurso había sido un golpe importante para Trump.