Estambul, Turquía, 1 de julio, 2016 (AP). Un extremista checheno planeó el triple atentado suicida en el aeropuerto de Estambul que mató a por lo menos 44 personas y se desconoce su paradero, reveló el viernes un congresista estadounidense.
Michael McCaul, presidente de la Comisión de la Cámara de Representantes para Seguridad Nacional, dijo a CNN que Akhmed Chatayev fue el cerebro que dirigió el ataque del martes por la noche contra el aeropuerto de Ataturk, uno de los más activos del mundo, y que también hirió a más de 230 personas.
Medios turcos y suecos también han identificado a Chatayev como el autor intelectual, a pesar de que las autoridades turcas no han confirmado su participación. El diario Sabah, que es cercano al gobierno, informó que la policía turca comenzó una cacería para atraparlo.
McCaul dijo que no está claro dónde está Chatayev, pero agregó que se sabe que trabajó como un lugarteniente importante del grupo Estado Islámico.
Aunque nadie ha reivindicado el triple atentado, se sospecha del Estado Islámico. El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, repitió el viernes que "muy probablemente" el Estado Islámico estuvo detrás del ataque. El grupo se ha jactado de tener células en Turquía, entre otros países.
"Ellos no tienen ninguna conexión con el Islam. Su lugar está en el infierno", opinó Erdogan, quien habló en Estambul después de las oraciones del viernes. Las víctimas "eran inocentes, niños, mujeres, ancianos... Se embarcaron en un viaje sin saber que se encontrarían cara a cara con la muerte".
Las autoridades creen que los tres agresores suicidas del ataque -que recordó a la matanza de este año en el aeropuerto de Bruselas- procedían de Rusia y dos naciones de Asia central, Uzbekistán y Kirguistán. No proporcionaron más detalles sobre sus identidades.
El diario Haber Turk afirmó en su sitio web que 11 sospechosos más -todos ellos extranjeros- fueron detenidos en otra operación en una vivienda de Estambul el viernes por la mañana. Una fuente del gobierno en Estambul no pudo confirmar la noticia en un primer momento.
El jueves fueron detenidas 13 personas en tres barrios de Estambul por sus posibles lazos con el atentado.
El Estado Islámico, que ha utilizado a Turquía para establecerse en las vecinas Siria e Irak, ha amenazado varias veces al país en su propaganda. Turquía, miembro de la OTAN, ha atribuido al grupo varios atentados importantes en el último año tanto en Ankara como en Estambul.
Los explosivos utilizados en el atentado eran una mezcla "manufacturada" de RDX, TNT y PETN, según el ministro turco del Interior. El químico y experto en explosivos de la Universidad de Rhode Island Jimmie Oxley describió las bombas como de calidad militar, lo que plantea la cuestión de cómo las consiguieron los agresores.
Turquía, que es un socio clave de la coalición liderada por Estados Unidos contra el grupo extremista, también enfrenta amenazas de seguridad de los rebeldes curdos que reclaman más autonomía para la región sureste del país, así como de radicales de ultraizquierda. Los rebeldes curdos han realizado numerosos ataques con automóvil bomba el año pasado, incluido el atentado del 17 de febrero en Ankara y otro atentado devastador en la capital el pasado marzo.
Mientras Turquía sigue investigando el ataque y buscando sospechosos, un funcionario turco afirmó que el ideólogo de un atentado suicida anterior había sido abatido. Las fuerzas de seguridad mataron a Mehmet Sirin Kaya en la localidad de Lice, en la provincia de Diyarbakir, de mayoría curda, según afirmó el viernes el funcionario.
El pasado 17 de febrero de febrero murieron 29 personas en un atentado suicida contra personal militar en Ankara que fue reivindicado por una escisión del Partido de los Trabajadores del Curdistán (PKK), que Turquía considera una organización terrorista.
El funcionario habló bajo condición de anonimato en línea con el protocolo del gobierno.