Sur de Mosul, Irak, 27 de octubre, 2016 (Reuters). El Ejército de Irak trataba el jueves de llegar a una localidad al sur de Mosul donde el Estado Islámico habría ejecutado a decenas de personas para advertir a la población sobre cualquier intento de apoyo a una ofensiva de la coalición liderada por Estados Unidos contra el grupo extremista en el país.
Tras 11 días de lo que se espera sea la mayor ofensiva por tierra en Irak desde la invasión encabezada por Estados Unidos en 2003, unidades del Ejército y la policía federal combatían contra fuego de francotiradores y coches bomba conducidos por suicidas al sur de Hamam al-Alil, el lugar de las supuestas ejecuciones a las afueras de Mosul, dijo un portavoz militar.
El Estado Islámico (EI) ejecutó en este lugar a decenas de prisioneros, en su mayoría ex miembros de la policía y el ejército iraquí, llevados desde pueblos que el grupo se ha visto forzado a abandonar por el avance de las tropas, dijeron el miércoles funcionarios en la región.
Las ejecuciones buscaban "aterrorizar a los otros, aquellos que están en Mosul en particular", y también para deshacerse de los prisioneros, dijo Abdul Rahman al-Waggaa, miembro del consejo provincial de Nínive. Algunas familias de los ejecutados también están retenidas en Hamam al-Alil, dijo.
El portavoz de derechos humanos de Naciones Unidas, Rupert Colville, dijo el martes que los combatientes del Estado Islámico supuestamente habían matado a una elevada cantidad de personas alrededor de Mosul en la última semana.
Un periodista de Reuters se encontró con parientes de presos en el sur de Mosul. Uno de ellos era un policía que había vuelto para ver a la familia que tuvo que dejar atrás cuando su pueblo cayó bajo el control del grupo islamista hace dos años.
"Temo que los vayan llevando de pueblo en pueblo hasta que lleguen a Mosul. Y entonces allí desaparecerán", dijo, pidiendo no ser identificado para proteger a los miembros de su familia aún en manos de los combatientes del Estado Islámico.
Los combatientes siguen defendiendo el acceso sur de Mosul, que ha retenido a las tropas iraquíes allí y forzó a unidad de élite del ejército a parar un rápido avance.
La caída de Mosul significaría la derrota efectiva del Estado Islámico en Irak.
La ciudad es mucho más grande que cualquier otra que haya capturado el grupo, y fue desde su Gran Mezquita donde en 2014 el líder del grupo, Abu Bakr al-Bagdadi, declaró un "califato" que también se extiende a partes de Siria.