Seúl, 18 de noviembre (Yonhap) -- El secretario general adjunto de las Naciones Unidas (ONU), Kim Won-soo, ha instado a Corea del Norte a detener sus provocaciones militares y programas de armas nucleares, que calificó como un grave desafío al régimen de no proliferación internacional.
Los programas nucleares y de misiles de Pyongyang han sido una fuente de gran preocupación durante los últimos 20 años, representando un serio desafío al régimen de no proliferación mundial, dijo, el jueves pasado, Kim, secretario general adjunto de la ONU y alto representante para Asuntos de Desarme, durante una conferencia conjunta entre Corea del Sur y la ONU en la isla vacacional de Jeju.
La 15ª Conferencia Conjunta entre la República de Corea y la ONU sobre los Asuntos de Desarme y No Proliferación concluyó, este viernes, sus dos días de duración, en la isla meridional surcoreana, habiendo reunido a unos 60 funcionarios gubernamentales y representantes de organizaciones internacionales, tanto de dentro como de fuera del país, a fin de discutir el programa nuclear norcoreano y otras cuestiones de no proliferación.
Kim dijo que se estima que el Norte ha logrado un avance en su desarrollo de armas nucleares que pueden ser cargadas en misiles, con sus pruebas nucleares cuarta y quinta, realizadas este año. El secretario adjunto dijo que, bajo tales circunstancias, es necesario realizar esfuerzos concertados de la comunidad internacional, para hacer frente a los desafíos que provienen de Pyongyang.
Kim señaló que las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU contra el Norte y otros países involucrados en la proliferación de armas de destrucción masiva son elementos clave para mantener la paz y seguridad del mundo.
El oficial dijo que su fiel implementación hace efectivas las resoluciones, instando a los miembros de la ONU a participar activamente en la implementación de las sanciones.