Bagdad, 21 de noviembre, 2016 (Reuters). Milicias chiíes estaban reuniendo sus tropas en Irak el lunes para cortar las rutas que aún quedan operativas hacia Mosul, la última fortaleza importante del grupo Estado Islámico en ese país, en un intento por cerrar el camino que une los segmentos sirios e iraquíes del autoproclamado califato.
Seis semanas después de iniciada la ofensiva apoyada por Estados Unidos sobre Mosul, el Estado Islámico está luchando en la zona de Tal Afar, 60 kilómetros al oeste, contra una coalición de grupos respaldados por Irán conocida como Movilización Popular.
Cortar el camino occidental a Tal Afar sellaría Mosul, una ciudad que ya está rodeada por el norte, el sur y el este por el Gobierno iraquí y las fuerzas kurdas Peshmerga.
Un portavoz de Movilización Popular dijo el fin de semana que sus fuerzas ya estaban avanzando hacia la carretera principal como parte de las operaciones para cortar los accesos a Mosul. Un reportero de Reuters dijo que se estaban reuniendo las tropas para cercar Tal Afar.
La fuerza aérea iraquí que apoya a Movilización Popular en los combates cerca de Tal Afar realizó una serie de ataques que mataron a 15 insurgentes, incluidos algunos que se escondían en un túnel cerca de la base aérea de Tal Afar, según un comunicado militar publicado el domingo por la noche.
La campaña para capturar Mosul comenzó el 17 de octubre con el apoyo aéreo y terrestre de una coalición liderada por Estados Unidos. Movilización Popular se unió a la ofensiva a fines de octubre, atacando Tal Afar y capturando la base aérea ubicada al sur de la ciudad el 16 de noviembre.
La ofensiva sobre Tal Afar podría provocar la fuerte molestia de Turquía, que teme que Irán tome el control de un pueblo donde viven principalmente turcomanos, suníes y chiíes, y que se encuentra cerca de la frontera con Siria.
El presidente turco, Tayyip Erdogan, ha dicho que Ankara responderá si las milicias "causan terror" en Tal Afar.