5 de enero, 2017 (Notimex). El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, debería tomar en serio tanto el tema del ciberespionaje como el alto cargo que está a punto de ocupar, consideró hoy el periódico Los Angeles Times.
“Trump se está dañando a sí mismo y a la nación al desechar a los servicios de inteligencia”, señaló el diario en uno de sus editoriales de este jueves.
“Sus recientes mensajes en redes sociales sobre los servicios de inteligencia son especialmente escandalosos”, opinó el rotativo, tras señalar que en su inclinación de emplear a la red Twitter “para compartir sus puntos de vista, (revelan que) a menudo esta mal informado”.
Trump publicó este tuit la noche del martes: “La reunión de ‘inteligencia’ sobre el llamado ‘hacking ruso' se retrasó hasta el viernes, tal vez más tiempo para construir un caso. Muy extraño". Es difícil saber por dónde empezar criticando esta breve misiva, indicó Los Angeles Times.
Por un lado, puede ser impreciso: un funcionario estadunidense expresó que había habido retraso alguno, diciendo que los principales funcionarios de inteligencia tenían desde el principio programada la reunión para el viernes, expresó.
Sin embargo, la mayor preocupación de todos es la implicación de que la evidencia de la participación de Rusia es tan frágil que los secretarios necesitan más tiempo para reunir (¿o inventar?) las pruebas, agregó.
Eso es consistente con la opinión previamente expresada por Trump de que la piratería podría haber sido llevada a cabo no por Rusia, sino por China o "alguien sentado en una cama en algún lugar".
Luego la mañana del miércoles, el presidente electo publicó otro tuit: "Julián Assange dijo que un niño de 14 años podría haber hackeado al presidente de campaña de Hillary Clinton, John Podesta- ¿por qué el Partido Demócrata fue tan descuidado?”.
Esto fue seguido por otro tuit en el que Trump citó a Assange diciendo que la cobertura de los medios estadunidenses era “muy deshonesta", indicó el rotativo. Trump añadió “más deshonesto de lo que nadie sabe". Pero, ¿por qué Trump abrazaría a Assange como una autoridad - antes de recibir una información exhaustiva de funcionarios de inteligencia estadunidenses?, cuestionó el diario.
El congresista Adam Schiff de Burbank, el demócrata que ocupa el cargo en el Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, emitió esta declaración el miércoles en respuesta a los últimos tuits de Trump. “Con cada tuit cargado de teoría de conspiración y comentario errático, A nuestra seguridad nacional, al tiempo que plantea nuevas preocupaciones acerca de su capacidad para crecer en el trabajo”, indicó.
“Cuando menosprecia la reputación de los valientes y trabajadores profesionales de la comunidad de inteligencia, perjudica nuestra seguridad nacional y las perspectivas de éxito de su propia administración", añadió. “Schiff tiene razón”.
El comité de inteligencia de Estados Unidos no es infalible, y cualquier presidente tiene la responsabilidad de someter sus conclusiones a un escrutinio. Pero eso no es lo que Trump estaba haciendo en su tormenta de tuit tras tuit”, anotó el periódico.
“Es posible, suponemos, que Trump haya llegado a una conclusión desinteresada de que las agencias de inteligencia estadunidenses no deben ser confiables”, puntualizó el diario.
Su consejero de seguridad nacional, el general retirado Michael Flynn, exdirector de la Agencia de Inteligencia de Defensa, criticó de manera pública a la Agencia Central de Inteligencia (CIA).
En una entrevista con el New York Times en 2015, Flynn sugirió que la CIA se había convertido en “una organización muy política”. Tal vez una opinión similar motiva el escepticismo de Trump sobre la conclusión de la CIA de que Rusia participó en las elecciones para ayudarlo.
Una explicación mucho más plausible es que Trump sigue viendo la cuestión de la intromisión rusa a través del prisma de su propio ego frágil. Como lo ve Trump, si se establece que los rusos se mezclaron en la elección para dañar a su oponente, algunos estadunidenses serán confirmados en la opinión de que la elección de Trump era ilegítima.
En diciembre pasado, Trump tuitió: “¿Puedes imaginar si los resultados de las elecciones fueron lo contrario y tratamos de jugar la tarjeta Rusia/CIA. ¡Se llamaría teoría de la conspiración!”. “Para Trump, las acusaciones de que Rusia interfirió en la elección eran solo una” carta “partidista a ser jugada por sus oponentes políticos”. “Nos gustaría pensar que, una vez que asuma el cargo, Trump dejará suelto esta actitud defensiva y la sospecha reflexiva de la comunidad de inteligencia”, indicó.
“La CIA y la NSA y otras agencias son, después de todo, poderosas organizaciones creadas para ayudar a los presidentes a gobernar, a proporcionarles hechos y contexto y análisis para tomar decisiones educadas sobre eventos mundiales”, explicó.
“Pero supongamos que no lo hace. Como señaló Schiff Trump está minando la confianza en la comunidad de inteligencia con cada pelea que él elige -y algún día, en una verdadera crisis de seguridad nacional, descubrirá que el pueblo estadunidense ya no los cree”, finalizó.