Taormina (Italia) - (EuroEFE).- El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, instó este viernes a la unidad al G7, que se reúne en la ciudad siciliana de Taormina, y dijo que esta cumbre será "una de las más difíciles" por las divergencias de sus miembros en algunos temas.
"La Unión Europea (UE) trabajará por la unidad y hará todo lo posible para llegar a un acuerdo. No hay duda de que es uno de los G7 más difíciles", dijo el político polaco en una rueda de prensa en Taormina, junto al presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker.
Tusk expresó su deseo de que el G7 muestre "unidad" y se salde con "una postura a favor" de las sanciones a Rusia por el conflicto en Crimea.
Unidad de los líderes del G7
También pidió unidad del G7 y la comunidad internacional para combatir el terrorismo internacional y concretamente al Estado Islámico (EI).
"Deben ser duros, incluso brutales contra el EI", advirtió el presidente comunitario desde Taormina, para después añadir que la lucha contra esta lacra será el "tema central" de las sesiones que el G7 mantendrá este viernes en la localidad siciliana.
También pidió cohesión en relación con "el objetivo más importante", el que guarda relación con la crisis migratoria y subrayó que este problema es "una cuestión global y no local".
Y recordó que en Sicilia, adonde llegan cientos de inmigrantes cada día después de ser rescatados en el Mediterráneo central, este es "un problema real".
"Esperemos convencer a nuestros nuevos colegas alrededor de la mesa", sostuvo.
Posibles divisiones en la reunión
Los temores de Tusk derivan de las posibles divisiones que podrían surgir en este G7, con cuatro miembros nuevos: el presidente de Estados Unidos, Donald Trump; el de Francia, Emmanuel Macron, y los primeros ministros de Italia y Reino Unido, Paolo Gentiloni y Theresa May.
Pero las diferencias podrían derivar especialmente de la Administración estadounidense, que actualmente revisa su postura en relación con el comercio exterior o la protección del medioambiente.
Por su parte, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, que también compareció en una rueda de prensa, dijo que este G7 "será tremendamente interesante porque permitirá conocer a los nuevos colegas".
Una sociedad abierta para construir puentes
Y subrayó que la UE por encima de todo cree "en una sociedad abierta que construye puentes y no muros".
En contra de las tesis proteccionistas defendidas desde Washington, Juncker negó que "la globalización sea una amenaza" y aseguró que es "una oportunidad".
Para defender su argumento, el luxemburgués explicó que un tercio de los ingresos de la UE proviene de su comercio con el mundo, algo que crea puestos de trabajo.
Y apuntó que este año, en los "veintisiete más uno" países de la UE (más Reino Unido), "crecerán los puestos de trabajo, lo que mejorará las finanzas públicas". Finanzas