LONDRES (Reuters) - Autoridades británicas dijeron el lunes que calculaban en 79 la cifra de muertos por el incendio que afectó la semana pasada a un edificio de departamentos en Londres, mientras el gobierno intentaba demostrar un mejor manejo de la tragedia.
El fuego estalló la madrugada del miércoles en la Torre Grenfell, un edificio de 24 pisos en el oeste de Londres. Muchos de sus residentes quedaron atrapados mientras dormían, en una tragedia que el cuerpo de bomberos calificó como sin precedentes por su magnitud y rapidez.
"Creo que hay 79 personas que o fallecieron o están desaparecidas y tristemente tengo que suponer que están muertas", dijo a medios Stuart Cundy, comandante de la Policía Metropolitana, desde el cuartel general en Londres.
El funcionario indicó además que se estableció formalmente la identidad de cinco de los muertos y que, debido a la intensidad de las llamas, nunca podría identificarse a algunas de las víctimas.
A las 1000 GMT, en todo Reino Unido se guardó un minuto de silencio en honor a las víctimas del incendio, en un ritual que se ha vuelto dolorosamente recurrente luego que desde marzo se registraron tres ataques extremistas en Londres y Manchester.
Los elogios para los servicios de emergencia contrastan con las críticas de la comunidad local hacia la respuesta del gobierno, que acusan fue lenta e inadecuada. La primera ministra, Theresa May, fue asediada por no reunirse con los residentes en su primera visita a la torre.
La tragedia se produce en un momento particularmente difícil para May. Su gobierno se ha visto afectado por la pérdida de la mayoría parlamentaria en la elecciones de la semana pasada y además se enfrenta a negociaciones difíciles para la salida de Reino Unido de la Unión Europea. Reuters