WASHINGTON (Reuters) - El fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, deberá responder el martes preguntas sobre sus vínculos con autoridades rusas y aclarar si entregó información imprecisa al Congreso de forma deliberada, mientras un panel del Senado investiga la supuesta intervención de Moscú en la elección de 2016.
El testimonio de Sessions ante la Comisión de Inteligencia del Senado, que comenzará a las 1830 GMT, podría resultar impactante ya que la investigación sobre Rusia sigue dominando la política en Estados Unidos y ha opacado a la agenda doméstica del presidente Donald Trump.
El exsenador republicano de Alabama, uno de los más ávidos partidarios de Trump durante la campaña presidencial, posiblemente tendrá que explicar por qué dijo a los legisladores en enero que no mantuvo contactos con funcionarios del Kremlin el año pasado.
Desde entonces, su personal ha reconocido que Sessions se reunió dos veces con el embajador ruso Sergei Kislyak y sostienen que no entregó información errónea al Congreso porque esos encuentros fueron parte de su trabajo como senador, no como miembro de la campaña de Trump.
Pero las revelaciones forzaron a Sessions a recusarse de la investigación en marzo y ahora el caso es liderado por un abogado especial.
A Sessions probablemente se le preguntará si tuvo un papel en la sorpresiva decisión de Trump de despedir al exdirector del FBI James Comey el mes pasado, una medida que desató fuertes críticas contra el mandatario y acusaciones de que intentó interferir en una investigación criminal.
El fiscal general también podría ser consultado sobre si se reunió con Kislyak por tercera vez. Rusia niega haber intervenido en la elección presidencial de Estados Unidos y la Casa Blanca niega cualquier colusión con Moscú.
Varios medios de prensa han reportado que Comey dijo la semana pasada a la Comisión de Inteligencia del Senado que el FBI estaba indagando si el fiscal general se reunió con Kislyak en un hotel de Washington el año pasado.
No estaba claro si Sessions planea contestar todas las preguntas o si invocará su privilegio ejecutivo de no divulgar conversaciones privadas con el presidente. Reuters