Londres, 5 jun (EFE).- La Policía británica admitió hoy que la reciente ola de atentados contra este país ha alcanzado un "nivel sin precedentes", al tiempo que indaga en el entorno de los tres terroristas que el sábado mataron en Londres a 7 personas y dejaron 48 heridos, de los que 18 continúan en estado crítico.
Scotland Yard ha identificado ya a los autores del último acto de terrorismo que, en menos de tres meses, ha conmocionado al Reino Unido, tras los perpetrados en la zona de Westminster el 22 de marzo -con un balance de cinco muertos, más el autor- y el de Manchester hace dos semanas, que segó la vida de 22 inocentes.
No obstante, por cuestiones operativas, la Met no ha difundido ningún dato ni detalle sobre los agresores mientras esclarece si formaban parte de una célula más amplia, aunque aclaró que prevé hacerlo "lo antes posible".
La comisaria jefa de la Met, Cressida Dick, animó hoy a los londinenses a no permitir que los terroristas les "impidan vivir su vida" con normalidad, a la vez que admitía que las fuerzas de seguridad tendrán que adaptarse a una "nueva realidad" a la vista de las frecuentes atrocidades cometidas por yihadistas.
Dick compareció junto con el alcalde de la capital, Sadiq Khan, en el mercadillo gastronómico de Borough, que, junto con el Puente de Londres, fue el otro escenario escogido por los atacantes.
Los tres varones atropellaron, primero, con un furgón blanco a decenas de peatones en el puente, para apuñalar a continuación indiscriminadamente a los ciudadanos que se encontraban en el concurrido mercado, muy popular entre los turistas.
Scotland Yard reconoce que ante este nuevo escenario conviene llevar a cabo una revisión "general" en este país de la "estrategia, tácticas y recursos disponibles" para abordar esta amenaza.
Desde 2013, los servicios de seguridad nacionales han abortado 18 complots para atentar en suelo británico, entre ellos cinco ataques cuya ejecución estaba prevista para semanas después del ataque suicida contra Westminster del pasado 22 de marzo.
En una entrevista con la emisora BBC Radio 4, Dick no descartó que esa nueva manera de atentar esté "inspirando" a otros fanáticos a agredir a la población.
"La retórica que llega del (grupo yihadista) Estado Islámico y otras organizaciones ha sido la de animar a la gente a que actúen en solitario, a emplear métodos rudimentarios y, sin duda, algunas personas que ven algo que desde su punto de vista distorsionado les parece exitoso, se pueden sentir inspirados", observó.
El laborista Sadiq Khan, el primer edil musulmán de Londres, se confesó "furioso" por el hecho de que los terroristas "usaran" el islám, la fe que él profesa, para "justificar" sus acciones.
Remarcó que "la ideología que siguen (los agresores) es perversa, está envenenada y no tiene ningún lugar en el islám", y aseguró que "Londres no se dejará amedrentar por el terrorismo", después de que el citado grupo yihadista se atribuyera la autoría.
Khan ha convocado hoy en el céntrico enclave de Potters Fields Park, ubicado frente a la Torre de Londres, una vigilia en la que se guardará un minuto de silencio por las víctimas.
Cuando quedan apenas tres días para que se celebren elecciones generales anticipadas en este país, la primera ministra, Theresa May, enfatizó que lo ocurrido no es solo "un ataque contra Londres y el Reino Unido, sino también contra el mundo democrático".
En una breve comparecencia en su residencia oficial de Downing Street, tras haberse reunido justo antes con el comité de emergencia del Gobierno, la líder tory reveló que la alerta por amenaza terrorista seguirá siendo "severa" en este país, el segundo nivel más alto en una escala de cinco.
Actualmente los agentes siguen interrogando a once personas -siete mujeres y cuatro hombres- detenidas el domingo, tras haber liberado a un hombre de 55 años.
Como parte de la pesquisa, los agentes registraron hoy varias direcciones de los barrios de Newham y Barking, en el este de la capital, donde se cree que vivía uno de los terroristas, según los medios.
Entre los 48 heridos que tuvieron que ser ingresados tras la tragedia, 36 siguen hospitalizados, repartidos en cinco centros médicos de la ciudad, y 18 de ellos están ahora en situación "crítica", según el último parte oficial.