TOKIO (Reuters) - La líder del grupo activista que ganó el Premio Nobel de la Paz el año pasado llamó el martes a Japón a unirse a un tratado de Naciones Unidas para prohibir las armas nucleares, diciendo que la estrategia de disuasión nuclear no traerá la paz.
El pedido de Beatrice Fihn, directora ejecutiva de la Campaña Internacional para Abolir las Armas Nucleares (ICAN, por su sigla en inglés), tuvo lugar en momentos en que Japón cuenta cada vez más con la protección nuclear de Estados Unidos mientras Corea del Norte continúa con el desarrollo de su programa nuclear y de misiles, desafiando la presión internacional.
“Si la disuasión nuclear crea paz, entonces deberíamos recibir con beneplácito el programa de armas nucleares de Corea del Norte. Entonces, debería haber paz ahora mismo, ¿no? Pero ese no es el caso”, comentó Fihn en una conferencia de prensa en Tokio.
“En vez de eso, tenemos mayores riesgos. De modo que creo que vemos claramente evidencias de que las armas nucleares alimentan la crisis”, agregó.
ICAN es una coalición de grupos no gubernamentales que hicieron campaña a favor de un Tratado de la ONU sobre la Prohibición de Armas Nucleares, que fue adoptado por 122 países en julio de 2017.
Japón, el único país que ha sufrido ataques nucleares, no participó en las negociaciones de la ONU para ese tratado, pues dijo que dichas conversaciones sin la presencia de países armados nuclearmente no contribuiría a conseguir un mundo sin armas nucleares. Tokio tampoco ha firmado el tratado aún.
“Necesitamos acción y liderazgo de Japón (...) Japón puede ser una autoridad moral sobre el desarme nuclear y eso puede empezar con que el primer ministro (Shinzo) Abe se una al tratado para prohibir armas nucleares”, declaró Fihn. ICAN