WASHINGTON (AP) — Donald Trump cree que necesitará recaudar mil millones de dólares para ser reelegido presidente y su gente asegura que está en camino de conseguirlos a partir de una formidable maquinaria que a los demócratas les costará mucho igualar.
La maquinaria representa un cambio enorme respecto al 2015, en que dijo que financiaría su campaña con su propio dinero. También revela hasta qué punto ha montado una operación mucho más profesional que la que lo llevó a la presidencia.
Ser el presidente en funcionas es siempre una ventaja en las elecciones. Y Trump anunció que buscaría la reelección el mismo día en que asumió y empezó a trabajar tempranamente con ese objetivo.
Mientras él recauda millones de dólares, sus potenciales rivales luchan por conseguir los fondos necesarios para estar en los debates de las primarias demócratas. Y el Comité Nacional Demócrata acarrea todavía deudas de campañas previas.
“Quien sea que logre la nominación demócrata, estará empobrecido. Tendrán que empezar de cero, bien por debajo de cero, ya que el CND está endeudado”, afirmó Michael Glassner, director de operaciones de la campaña de Trump. El dirigente republicano dijo que la decisión de Trump de mantener su operación en marcha durante sus dos primeros años en la presidencia ofrece un “nuevo modelo” para los futuros presidentes.
Hacia fines del 2018, las últimas cifras disponibles, la campaña de Trump había recaudado más de 129 millones de dólares. Su predecesor Barack Obama, en comparación, no empezó su campaña reelectoral del 2012 sino hasta el 2011. La campaña de Trump asegura que cuenta con “mucho más” dinero que los 19 millones de dólares que tenía en sus arcas a fines del 2018.
Trump tenía programada el viernes una actividad de recaudación de fondos en Los Ángeles. La admisión a una cena costaba 15.000 dólares, una foto con el mandatario 50.000 y participar en una mesa redonda con Trump 150.000 dólares. Los organizadores esperan que asistan unas 170 personas.
Los republicanos siempre están detrás de los demócratas en la recaudación de dinero online desde que se inventó ese medio hace unas dos décadas. Pero Trump ha acortado la brecha, atrayendo muchos donantes que aportan pequeñas sumas.
En el 2015 Trump juró que no recibiría dinero de nadie. “Uso mi propio dinero. No el de los cabilderos”, proclamó. “Soy rico”.
Pero tras conseguir la nominación republicana cambió de libreto, cediendo a las presiones asociadas con una campaña presidencial. También recaudó millones de dólares mediante la venta de artículos como gorras con la inscripción MAGA, Make America Great Again (Hagamos que Estados Unidos vuelva a ser grande), el principal lema de su campaña.
Trump donó o prestó 66 millones de dólares a su campaña en el 2016.
Para el 2020 no ha aportado un solo centavo hasta ahora y sus asesores no esperan que lo haga. Pero desde que asumió ha participado en 55 eventos para donantes fuertes, según al Comité Nacional Republicano.
La campaña se beneficia del hecho de que tiene una operación montada desde el 2015, de acuerdo con la presidenta del Comité Ronna McDaniel, lo que da a los donantes tiempo para “integrar y redondear nuestras operaciones”.
La campaña sigue buscando donantes nuevos y conserva listas de personas que hicieron aportes para causas importantes como la nominación de Brett Kavanaugh para la Corte Suprema y una reforma fiscal.
McDaniel asegura que hay más de 1,1 milles de donantes nuevos desde las elecciones. Y que ha habido al menos siete días en los que se recaudaron más de un millón de dólares en lo que va del año.
“Es un esfuerzo cohesionado y coordinado entre la campaña y el CNR, que no funciona tan bien desde la campaña de (George W. Bush) del 2004”, expresó la asesora del comité Katie Walsh, ex subjefa de despacho de la Casa Blanca.
Trump asistirá a eventos de recaudación de fondos la semana que viene en San Antonio y Houston.
El director de campaña de Trump, Brad Parscale, dice que gastarán mil millones de dólares en el 2020, tres veces lo que gastaron en el 2016.
Dan Eberhart, donante de Trump, dice que mientras que en el 2016 el magnate tuvo que competir con muchos candidatos, esta vez “la gran, gran mayoría de los donantes republicanos reman para el mismo lado”. Trump