WASHINGTON (AP) — Bajo la creencia de que al fin se quitó de encima una nube que llevaba dos años instalada sobre la Casa Blanca, el presidente Donald Trump afirmó que el testimonio del miércoles de Robert Mueller ante el Congreso era una clara victoria, y se mofó de los hallazgos y desempeño del ex fiscal especial.
Trump condenó “la nube de falsedad” creada por la investigación y aseveró que “no había defensa para este engaño ridículo, esta cacería de brujas”.
“Esto ha sido algo muy malo para nuestro país”, dijo Trump a la prensa cuando salía de la Casa Blanca poco después de que Mueller concluyera su testimonio. Fue una “vergüenza y desperdicio de tiempo”, declaró.
Aunque había declarado que quizás no vería la comparecencia, Trump tuiteó más de una decena de veces durante el testimonio de Mueller sobre su investigación del presidente y los vínculos de la campaña de Trump con Rusia. Al terminar, Trump tuiteó: “La verdad es una fuerza de la naturaleza”.
Y, como la mayoría de sus allegados, incluido su hijo mayor, Trump se obsesionó con el desempeño de Mueller, señalando su falta de familiaridad con algunos de los aspectos de la investigación y acusándolo de favoritismos.
“El desempeño obviamente no fue muy bueno. Tuvo muchos problemas”, dijo Trump. “Este fue un día devastador para los demócratas”.
Incluso cuando el testimonio no había concluido, los republicanos declararon victoria.
Rudy Giuliani criticó los constantes tartamudeos de Mueller y sus peticiones para que repitieran las preguntas, y tuiteó que el exdirector del FBI estaba “siendo destruido en credibilidad, conocimiento, competencia y numerosos ‘ahs’, pausas y excusas como ‘más allá de mi alcance’”.
La comparecencia en el Capitolio de Mueller televisada a nivel nacional se consideraba desde hace mucho como un punto de inflexión para la presidencia, uno que podría unir a los demócratas de la cámara baja para iniciar un juicio político o ayudar a dispersar la nube investigadora que ha eclipsado durante más de dos años a la Casa Blanca.
Siempre conscientes de la necesidad de generar poderosas imágenes televisadas, Trump y otros republicanos desataron una serie de tuis y declaraciones que replicaron ataques previos en los que Trump ha hecho afirmaciones infundadas sobre la pesquisa de Mueller y sus hallazgos.
Incluso antes de que Mueller se sentara a testificar, el presidente había tuiteado nueve veces sobre la investigación, dejando en claro que su mente se enfocaba meramente en los procedimientos que se desarrollaban del otro lado de la avenida Pennsylvania.
“¿Así que los demócratas y otros pueden ilegalmente fabricar un crimen, tratar de imputarlo a un presidente muy inocente, y cuando éste disputa este ataque ilegal y traicionero contra nuestro país, ellos lo llaman obstrucción”, tuiteó Trump temprano. “Muy mal. ¿Por qué Robert Mueller no investigó a los investigadores?”. AP