WASHINGTON (AP) — El gobierno del presidente Donald Trump extendió el miércoles las exenciones que permiten a compañías extranjeras trabajar en las instalaciones nucleares de Irán sin ser objeto de sanciones por parte de Estados Unidos.
En un aviso enviado al Congreso, el Departamento de Estado señaló que extendió 90 días las exenciones que permiten que compañías europeas, rusas y chinas realicen labores de cooperación civil y nuclear en varias instalaciones iraníes.
Los permisos, que originalmente expirarían el jueves, han sido parte de un intenso debate interno con quienes se oponen a las extensiones. Sin embargo, hay quienes argumentan que se requería de más tiempo para permitirles a las compañías cerrar gradualmente sus operaciones.
Las exenciones son los únicos elementos que Estados Unidos aún reconoce del acuerdo nuclear con Irán firmado en 2015 y del cual el gobierno de Trump se retiró el año pasado.
Además, el gobierno estadounidense anunció sanciones financieras en contra del ministro del Exterior de Irán Javad Zarif como parte de una escalada en la presión sobre la república islámica. La medida sumamente inusual de penalizar a un alto diplomático de otro país ocurre un mes después de que Trump firmó un decreto para sancionar al líder supremo de Irán, ayatolá Alí Jamenei.
Esas sanciones son prácticamente simbólicas, ya que las autoridades estadounidenses señalaron que no se restringirán los traslados de Zarif a Nueva York para participar en eventos oficiales de Naciones Unidas, en apego a las obligaciones internacionales de Estados Unidos, y al hecho de que el diplomático tiene bienes financieros mínimos en jurisdicciones estadounidenses.
“No me afecta ni a mí ni a mi familia, ya que no tengo propiedades ni bienes fuera de Irán”, tuiteó Zarif en respuesta al anuncio. AP