VIENA (AP) — Irán casi ha triplicado su provisión de uranio enriquecido en los últimos tres meses y ahora tiene más de una tonelada, en violación del acuerdo nuclear de 2015 con las potencias mundiales, y se niega a responder preguntas sobre tres posibles sitios nucleares no declarados, reveló el martes la agencia de supervisión nuclear de las Naciones Unidas.
En un documento confidencial a los países miembros y al que tuvo acceso The Associated Press, el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) dijo que, al 19 de febrero, Irán acumulaba 1.020,9 kilos de uranio enriquecido, comparado con 372,3 kilos de acuerdo con el informe del 3 de noviembre de 2019.
Con la cantidad de uranio enriquecido acumulado, Irán está ahora al borde de la capacidad de fabricar un arma nuclear, algo que Teherán insiste que no desea.
El acuerdo nuclear de 2015, firmado con Estados Unidos, Alemania, Francia, Gran Bretaña, China y Rusia le permite acumular 202,8 kilos. El acuerdo nuclear prometía otorgar incentivos económicos a Irán a cambio de limitar su programa nuclear, pero desde que el presidente Donald Trump retiró unilateralmente a Estados Unidos del acuerdo en 2018, Irán ha estado violando lentamente las restricciones del pacto.
Con las violaciones, Teherán ha dicho que espera presionar a las otras naciones involucradas para que aumenten los incentivos económicos para compensar las severas sanciones impuestas por Washington después del retiro estadounidense.
En un segundo informe publicado el martes, el OIEA dijo que ha identificado tres lugares donde en Irán posiblemente almacena materiales nucleares o donde se realizaron actividades relacionadas sin declararlas a los observadores internacionales.
Dijo que había enviado preguntas a Irán en tres cartas separadas, pero que nunca recibió respuestas.
Según la Asociación para el Control de Armas, con sede en Washington, Irán necesitaría unos 1.050 kilos de uranio de bajo enriquecimiento _con una pureza de menos de 5%_ y tendría que enriquecerlo al 90% para poder fabricar un arma.
El OIEA había dicho anteriormente que se habían detectado partículas de uranio de origen artificial en un lugar no declarado en las afueras de Teherán, lo que parece confirmar las denuncias de Estados Unidos e Israel sobre un depósito nuclear secreto.
La agencia dijo que Teherán respondió en una carta el 28 de enero que “Irán no reconocerá denuncia alguna sobre actividades pasadas y no se considera obligado a responder a tales denuncias”.
OIEA respondió que sus pedidos de aclaraciones eran congruentes con el compromiso de Irán de permitir inspecciones de sus instalaciones nucleares y no dependían del acuerdo nuclear firmado por la República Islámica y las potencias mundiales en 2015.
VIENA (AP) — Irán casi ha triplicado su provisión de uranio enriquecido en los últimos tres meses y ahora tiene más de una tonelada, en violación del acuerdo nuclear de 2015 con las potencias mundiales, y se niega a responder preguntas sobre tres posibles sitios nucleares no declarados, reveló el martes la agencia de supervisión nuclear de las Naciones Unidas.
En un documento confidencial a los países miembros y al que tuvo acceso The Associated Press, el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) dijo que, al 19 de febrero, Irán acumulaba 1.020,9 kilos de uranio enriquecido, comparado con 372,3 kilos de acuerdo con el informe del 3 de noviembre de 2019.
Con la cantidad de uranio enriquecido acumulado, Irán está ahora al borde de la capacidad de fabricar un arma nuclear, algo que Teherán insiste que no desea.
El acuerdo nuclear de 2015, firmado con Estados Unidos, Alemania, Francia, Gran Bretaña, China y Rusia le permite acumular 202,8 kilos. El acuerdo nuclear prometía otorgar incentivos económicos a Irán a cambio de limitar su programa nuclear, pero desde que el presidente Donald Trump retiró unilateralmente a Estados Unidos del acuerdo en 2018, Irán ha estado violando lentamente las restricciones del pacto.
Con las violaciones, Teherán ha dicho que espera presionar a las otras naciones involucradas para que aumenten los incentivos económicos para compensar las severas sanciones impuestas por Washington después del retiro estadounidense.
En un segundo informe publicado el martes, el OIEA dijo que ha identificado tres lugares donde en Irán posiblemente almacena materiales nucleares o donde se realizaron actividades relacionadas sin declararlas a los observadores internacionales.
Dijo que había enviado preguntas a Irán en tres cartas separadas, pero que nunca recibió respuestas.
Según la Asociación para el Control de Armas, con sede en Washington, Irán necesitaría unos 1.050 kilos de uranio de bajo enriquecimiento _con una pureza de menos de 5%_ y tendría que enriquecerlo al 90% para poder fabricar un arma.
El OIEA había dicho anteriormente que se habían detectado partículas de uranio de origen artificial en un lugar no declarado en las afueras de Teherán, lo que parece confirmar las denuncias de Estados Unidos e Israel sobre un depósito nuclear secreto.
La agencia dijo que Teherán respondió en una carta el 28 de enero que “Irán no reconocerá denuncia alguna sobre actividades pasadas y no se considera obligado a responder a tales denuncias”.
OIEA respondió que sus pedidos de aclaraciones eran congruentes con el compromiso de Irán de permitir inspecciones de sus instalaciones nucleares y no dependían del acuerdo nuclear firmado por la República Islámica y las potencias mundiales en 2015.