El Ejército de Irak consiguió mantener el control de una estratégica presa en la provincia de Diyala, luego de que unos 60 combatientes del Estado Islámico, entre ellos terroristas suicidas, intentaran atacar el lugar. Los enfrentamientos ocurrieron este domingo (15.02.2015) según un alto mando castrense, que informó que las tropas leales a Bagdad causaron la muerte de doce yihadistas.
La presa de Al Azim, ubicada al noreste de la capital iraquí, está ubicada en una zona de enlace entre Diyala y la vecina Saladino, por lo que es usada como cruce por las tropas. El comandante de la V División del Ejército iraquí, general Ali Fadel Amran, explicó que entre los terroristas abatidos figura un cabecilla identificado como “Abu Moaz”, originario de un país árabe que no fue especificado.
Asimismo, el general señaló que sus tropas lograron destruir tres coches-bomba y se hicieron con otros cuatro cargados con armas. “La atención de las fuerzas iraquíes hizo fracasar el plan, por lo que el Ejército controla totalmente la presa”, subrayó Amran en la nota. Las presas figuran entre los principales objetivos del EI en Irak, ya que a finales de enero el Ejército lo expulsó del embalse Al Sudur, cerca de la ciudad de Al Meqdadiya, al norte de Baquba, capital de Diyala, después de intensos combates.
Secuestro de policías
En otra zona del frente, el Estado Islámico se anotó un “éxito” al secuestrar a 25 policías y causar la muerte de otros tres, de acuerdo a información proporcionada por el portal de noticias Al Sumaria. El hecho ocurrió cerca de la ciudad de Al Bagdadi, en el norte de Irak. La localidad había sido tomada el pasado viernes por la milicia radical, que entonces también intentó controlar una base militar, pero fueron repelidos en el intento.
Los policías fueron secuestrados en la localidad de Hit, próxima a Al Bagdadi. Según algunos reportes, el EI ha realizado en Hit ejecuciones masivas de miembros de tribus leales al gobierno. Todo esto ocurre mientras en Bagdad, grupos parlamentarios sunitas suspendieron su participación en el Congreso luego de que un importante líder tribal de ese grupo religioso fuera asesinado la noche del sábado.