Estados Unidos no tiene dudas de que Rusia está tras el resurgir de los rebeldes en el este de Ucrania. "No podemos cerrar los ojos para no ver los tanques que entran en Ucrania a través de la frontera con Rusia, a los rusos en uniforme sin signos de distinción, los misiles y los sistemas de radar", ha dicho el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, hoy durante una visita a Kiev, donde se ha entrevistado con el presidente ucraniano, Petro Poroshenko y con altos cargos del gobierno.
Su llegada a la capital ucraniana se produce mientras Washington baraja la idea de suministrar armas al gobierno ucraniano para que pueda así contener el avance de los separatistas. La principal pega de esta idea es que Moscú pueda incrementar la ayuda a los prorrusos.
La escalada de tensión entre Washington y Moscú ha ido en aumento desde que los rusos se anexionasen en marzo la península de Crimea. El presidente Barack Obama no tiene intención de ceder: "Seguiremos estas dos líneas: presionar a Rusia y apoyar a Ucrania", dijo en una entrevista a CNN el pasado fin de semana.
Sanciones
EEUU y la UE aprobaron varios paquetes de sanciones contra Moscú que afectan tanto a particulares como a empresas concretas y a sectores enteros de la economía rusa."No buscamos confrontación con Rusia: ni el presidente [de Ucrania, Petro] Poroshenko, ni EEUU, ni la UE", ha dicho Kerry durante la rueda de prensa en Kiev. De hecho recordó que Rusia podrá evitar 'el aislamiento internacional', pero solo a condición de que el conflicto en Ucrania se solucione de manera pacífica. Moscú sigue negando estar respaldando a los insurgentes.
Kerry ha afirmado que EEUU espera medidas concretas para cesar el fuego en Donbás tanto por parte de los milicianos como por parte de Rusia que debe usar la influencia que tiene sobre ellos.
La cita de Hollande y Merkel en Moscú con el presidente Vladimir Putin puede ser un primer paso hacia el desbloqueo de una situación que se le está escapando de las manos a Kiev, cuyos soldados apenas logran contener el avance rebelde en lugares estratégicos como Debaltsevo y fueron expulsados el mes pasado del aeropuerto de Donetsk.