NOVO-OGARYOVO, Rusia (Reuters) - El presidente Vladimir Putin advirtió el miércoles que Rusia podría cortar los envíos de gas natural a Ucrania si Kiev no paga por adelantado, aumentando la posibilidad de que el tránsito del combustible hacia Europa se interrumpa por cuarta vez en los últimos años.
Tras criticar la decisión ucraniana de suspender los envíos de gas natural a las regiones separatistas del este que se han levantado contra la soberanía de Ucrania, Putin dijo: "Imaginen a esa gente que se quedará sin gas en invierno. No está solo el hambre (...) huele a genocidio".
El mandatario indicó que espera que no haya cortes en el suministro ruso, pero advirtió que Europa depende de la "disciplina financiera" de Ucrania.
Europa recibió unos 147.000 millones de metros cúbicos de gas ruso el año pasado, cerca de un tercio de sus necesidades totales. Apenas el 40 por ciento atravesó Ucrania.
Kiev y Moscú dicutieron el año pasado por el suministro de gas y su precio, profundizando el deterioro de las relaciones entre los dos países vecinos, ahora que las fuerzas ucranianas combaten a los separatistas prorrusos en el este del país.
Rusia detuvo los envíos de gas a Ucrania tres veces en los últimos años: en 2006, 2009 y el año pasado, tras acusar a Kiev de no pagar.
Occidente acusa a Moscú de usar la energía como un arma geopolítica para mantener a Ucrania bajo su influencia.
Esta vez, la disputa está centrada en el suministro a las regiones ucranianas de Donetsk y Luhansk, realizado en la actualidad de forma directa por Rusia con gas contratado para Ucrania.
"Si no se realiza el pago anticipado, Gazprom, según el contrato (...) suspenderá los envíos. Por supuesto, esto puede generar una amenaza al tránsito a Europa, a nuestros socios europeos", comentó Putin.
"Esperamos (...) que no se interrumpa el suministro de gas. Pero esto no depende solo de nosotros, depende de la disciplina financiera de nuestros socios ucranianos", agregó.
Putin dijo que Ucrania tiene suficiente gas para cubrir sus necesidades durante tres o cuatro días, pero acusó a Kiev de castigar a sus ciudadanos del este al negarse a entregarles gas.