Cruz, senador por Texas de 45 años, ganó las elecciones primarias en Kansas y Maine el sábado, reforzando su argumento de que es la principal alternativa frente a Trump, un multimillonario de 69 años de discurso afilado.
Los líderes del Partido Republicano están descontentos con los llamados de Trump a construir un muro en la frontera con México, deportar a 11 millones de inmigrantes ilegales y prohibir temporalmente el ingreso de todos los musulmanes a Estados Unidos.
Muchos republicanos de la corriente principal del partido se resisten, sin embargo, a apoyar a Cruz, a quienes ven como demasiado conservador para el electorado general en las elecciones del 8 de noviembre, donde se elegirá al sucesor del presidente demócrata Barack Obama.
Cruz, un favorito de los evangélicos, ha llamado a que Estados Unidos lleve a cabo bombardeos intensivos contra el grupo Estado Islámico y se ha comprometido a eliminar el Servicio de Impuestos Internos y cuatro organismos del gabinete.
Sin embargo, él enfureció a muchos colegas republicanos cuando dirigió la campaña en el 2013 para un enfrentamiento en el Congreso de Estados Unidos que llevó a un cierre parcial de 16 días del Gobierno federal.
El encuestador republicano Neil Newhouse dijo que Cruz aún no ha demostrado una capacidad para atraer más allá de los votantes más conservadores.
