DES MOINES, Iowa (AP) -- Faltando tres semanas para los comicios presidenciales en Estados Unidos, estrategas republicanos en todo el país reconocen públicamente que Hillary Clinton tiene asegurados los 270 votos en el Colegio Electoral necesarios para llegar a la Casa Blanca y que su victoria sobre el republicano Donald Trump podría ser aún más amplia.
Trump "va en camino de un derrumbe total y absoluto", dijo el encuestador republicano asesor de la campaña de reelección del senador por Florida Marco Rubio. Como muchos estrategas de su partido, estaba dispuesto a hablar públicamente sobre el arduo camino que aguarda al candidato republicano en el último tramo de una campaña sin precedentes.
Puede haber cambios antes del 8 de noviembre. Falta un debate y no sería la primera vez que Trump se rehace. Sus partidarios acérrimos siguen firmes con él.
Sin embargo, junto con indicadores tales como encuestas, giras de campaña, personal en el terreno y propaganda, las entrevistas con políticos profesionales republicanos no afiliados a la campaña de Trump indican que solo un derrumbe de proporciones épicas le impediría a Clinton obtener los votos suficientes en el colegio electoral para llegar a la presidencia.
Durante la semana anterior, la campaña de Trump fue golpeada por denuncias de mujeres que dijeron haber sido acosadas sexualmente por el multimillonario en las últimas tres décadas. Las votaciones anticipadas en estados cruciales como North Carolina y Florida dan indicios positivos para Clinton y las donaciones al Comité Nacional Republicano se han reducido en un 25% en los últimos tres meses con respecto al mismo período de 2012, cuando Mitt Romney era el candidato.
Las encuestas de intención de voto han girado generalmente en dirección a Clinton, tanto las nacionales como en una serie de estados disputados.
Whit Ayres |
Si las elecciones fueran hoy, Clinton probablemente se llevaría la costa del Pacífico y el noreste, así como la mayor parte de la región de los Grandes Lagos en la frontera con Canadá, un territorio que Trump consideraba suyo gracias a su mensaje populista contra el libre comercio.
El único estado en duda en esa región del país es Ohio, siempre disputado, pero que en estas elecciones no tendría un papel decisivo dada la fuerza de Clinton -y la debilidad de Trump- en otras partes.
Trump y su compañero de fórmula Mike Pence han hecho campaña en Pennsylvania, que se inclinó por el candidato demócrata en las últimas seis elecciones, pero su estrategia de contener a Clinton en Filadelfia y alrededores mientras ganan más votos en las regiones más conservadoras no ha dado resultados.
"Las mujeres en los suburbios de Filadelfia lo están aplastando", dijo el encuestador republicano Ed Goeas, que sigue de cerca los estados disputados y varias contiendas por bancas en el Senado. News from The Associated Press