Washington, 6 de enero, 2017 (Reuters). La prohibición temporal para que ciudadanos de siete países ingresen a Estados Unidos decretada por el presidente Donald Trump enfrentaba el lunes el primero de varios obstáculos legales, que podrían determinar si el mandatario puede llevar a cabo la política más controvertida y de largo alcance en sus primeras dos semanas en el cargo.
El Gobierno tiene el lunes una fecha límite para justificar el decreto que restringe temporalmente el ingreso a Estados Unidos de inmigrantes procedentes de los siete países de mayoría musulmana y la entrada de refugiados, luego de que un juez federal de Seattle bloqueó la medida el viernes.
La incertidumbre causada por la decisión del juez de distrito James Robart abrió la puerta para que viajeros de Irán, Irak, Libia, Somalia, Sudán, Siria y Yemen entren en Estados Unidos.
El republicano Trump reaccionó a la decisión con ataques al juez federal y al sistema judicial, a quienes culpa de obstaculizar sus esfuerzos para cumplir con una promesa central de su campaña del año pasado para llegar a la Casa Blanca.
Los demócratas, por su parte, intentaron utilizar los ataques de Trump sobre el poder judicial para plantear interrogantes sobre la independencia del candidato nominado por el presidente como juez de la Corte Suprema, Neil Gorsuch.
El Tribunal de Apelaciones de Estados Unidos del Noveno Circuito rechazó el fin de semana la petición del Gobierno de Trump para suspender de forma inmediata el fallo, aunque el tribunal dijo que podría reconsiderar la solicitud del Ejecutivo después de recibir más información.
El Gobierno tiene hasta las 23:00 GMT del lunes para presentar sus alegatos adicionales al tribunal de apelaciones para justificar el decreto de Trump. Se espera que la corte actúe con rapidez y que el caso finalmente llegue a la Corte Suprema de Estados Unidos.
Gigantes de la tecnología como Apple, Google y Microsoft se unieron a las cerca de 100 compañías que el domingo presentaron un escrito legal para oponerse a la prohibición de Trump contra los inmigrantes, argumentando que "infringe un daño significativo a las empresas de Estados Unidos".
Trump ha prometido varias veces restablecer su prohibición a los viajes, mientras que los críticos han dicho que la medida es discriminatoria, inútil y legalmente dudosa.
El domingo, Trump atacó a través de Twitter al juez Robart y al sistema judicial.
"Simplemente no puedo creer que un juez pueda poner a nuestro país en tal peligro", dijo el mandatario. "Si pasa algo la culpa es de él y del sistema judicial", añadió.