Bruselas, 22 mar (EFE).- Bruselas conmemoró hoy, bajo estrictas medidas de seguridad, el primer aniversario de los peores atentados de su historia, que costaron la vida a 32 personas y causaron más de 320 heridos en dos ataques en el aeropuerto y en el metro de la capital belga.
Con el Ejército aún patrullando las calles y un despliegue policial visible, los homenajes comenzaron a primera hora de la mañana en el aeropuerto de Bruselas en Zaventem, donde se dieron cita numerosas víctimas, los reyes de los belgas, Felipe y Matilde, y el primer ministro del país, Charles Michel.
El sobrio homenaje arrancó con la actuación musical de Eddy Van Calster, experto en neurociencia que perdió a su esposa en el atentado del aeropuerto y que ha compuesto una canción en la que lamenta su muerte.
A continuación se leyeron los nombres de las 16 víctimas mortales del ataque al aeropuerto y el monarca depositó frente a un escenario una corona de flores.
A las 07.58 horas (06.58 GMT), la misma hora en la que dos terroristas kamikazes activaron sus chalecos explosivos, los asistentes guardaron un minuto de silencio, al que siguieron los testimonios de varias víctimas.
"A menudo, me pregunto qué habría sucedido si nos hubiéramos marchado diez minutos más tarde o si hubiéramos conducido más despacio; pero sucedió, y en pocos segundos mi mundo cambió de la emoción de viajar juntos a Nueva York al horror en el que me encontré", declaró Lars Waetzmann, que perdió a su mujer en el ataque.
Los recuerdos hicieron mella en una de las víctimas asistentes, que perdió el conocimiento y fue trasladado en ambulancia a un centro hospitalario.
"Un año después, podemos decir que hemos superado esta tragedia que, no obstante, permanecerá en el corazón de todos los trabajadores del aeropuerto", comentó a Efe la portavoz del aeródromo, Florence Muls.
Muls destacó que el aeropuerto ha recuperado las cifras de pasajeros previas al atentado lo que, en su opinión, permitiría hablar de "una vuelta a la normalidad".
El homenaje a los fallecidos y heridos en Zaventem prosiguió en los alrededores del aeropuerto, donde se reinauguró el monumento "Flight in Mind" (Vuelo en la Mente), que se encontraba hace un año en la terminal de salidas y quedo dañado por la explosión.
En su nueva ubicación, está rodeado de 16 arbustos que recuerdan a las víctimas y conserva las huellas del ataque en su estructura.
Poco después, los reyes de Bélgica llegaron a la estación de metro de Maelbeek, en pleno barrio europeo, donde un terrorista suicida mató a otras 16 personas hace un año.
A las 09.11 horas (08.11 GMT), los reyes, acompañados del primer ministro, Charles Michel, guardaron otro minuto de silencio y saludaron a familiares y víctimas del atentado, así como a los trabajadores de la empresa de transportes metropolitanos Stib y de los servicios de auxilio que atendieron a los heridos el día del ataque.
Además, el ministro-presidente de la región de Bruselas, Rudi Vervoort, desveló una placa conmemorativa.
A continuación, los monarcas y las autoridades asistieron en el barrio europeo a la inauguración de un monumento del artista belga Jean-Henri Compère dedicado a todas las víctimas de actos terroristas.
"Nadie puede pretender comprender completamente el sufrimiento que viven ustedes" y "queremos escuchar vuestro dolor", dijo el rey Felipe durante el acto.
Desde la Unión Europea (UE), el presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker, aseguró que los europeos han reafirmado "su unidad en la lucha contra el terrorismo" desde los atentados de Bruselas y han respondido al odio y la violencia con democracia, paz y diversidad.
Los actos continuarán durante la tarde con tres manifestaciones en recuerdo de las víctimas que partirán desde el barrio de Molenbeek, la Estación de tren del Norte y la Plaza de Luxemburgo, en el barrio europeo, y concluirá en la plaza frente a la Bolsa.
Los habitantes de Bruselas continúan con sus ocupaciones diarias, pero con la presencia de soldados en las calles, ocasionales alertas de bomba falsas y con el deseo de superar lo sucedido hace un año. México :: Mundo