EDIMBURGO (Reuters) - El Parlamento de Escocia votó el martes a favor de la propuesta de la ministra principal Nicola Sturgeon de llevar adelante un nuevo referendo por la independencia a fines de 2018 o inicios del año siguiente, una vez que estén más claros los términos de la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea.
Tal como se esperaba, el legislativo decidió, por 69 votos a favor y 59 en contra, darle a Sturgeon un mandato para tratar de conseguir un permiso del Parlamento Británico en Londres que permita avanzar con los preparativos para un referendo.
El Parlamento británico -donde la primera ministra Theresa May tiene mayoría- decide si Escocia puede celebrar un segundo plebiscito.
"Escocia, al igual que el Reino Unido, está frente a una encrucijada", dijo Sturgeon al inicio del debate parlamentario del martes.
"Cuando el Artículo 50 del Tratado de Lisboa se active mañana, el camino para nuestro país será inevitable (...) habrá un impacto en el comercio, la inversión y nuestros estándares de vida. Y un impacto en la naturaleza de la sociedad en la que vivimos".
El Gobierno británico dijo que no negociará la propuesta escocesa. "Sería injusto para el pueblo de Escocia pedirles que tomen una decisión crucial sin la información necesaria para nuestra futura relación con Europa", destacó.
Escocia votó contra la independencia en un referendo en 2014, pero Sturgeon señala que la situación ha cambiado debido a la decisión británica de abandonar la UE.
"Cuando se aclare la naturaleza de los inevitables cambios por el Brexit, ese cambio no debería ser una imposición para nosotros", sostuvo Sturgeon. "El pueblo de Escocia debería tener el derecho de elegir entre un Brexit, probablemente un Brexit muy difícil, o convertirse en un país independiente que pueda definir su propio curso".