Washington, 14 may (EFE).- Apenas un 29 % de los estadounidenses apoya la decisión del presidente Donald Trump de despedir a James Comey como director del FBI, mientras que un 38 % la desaprueba, según un sondeo divulgado hoy.
La encuesta, realizada por la cadena NBC y el diario "The Wall Street Journal", indica que otro 32 % de los entrevistados evita pronunciarse sobre el despido fulminante de Comey, anunciado el pasado martes y que ha provocado una crisis sin precedentes en el Gobierno de Trump, quien asumió la Presidencia en enero pasado.
Entre quienes afirman que han leído o escuchado "mucho" sobre el tema, el desacuerdo con la decisión de Trump sube hasta el 53 %, frente al 33 % que la apoya.
El sondeo se elaboró del 11 al 13 de mayo con entrevistas a 800 adultos y su margen de error es de +/- 3,5 puntos porcentuales.
Trump comentó el sábado que quiere designar "rápido" a un nuevo director para el Buró Federal de Investigaciones (FBI), un cargo que requiere confirmación del Senado, y dijo que es posible que eso ocurra incluso antes del próximo viernes, cuando partirá hacia Arabia Saudí en su primera gira internacional.
El presidente describió a los candidatos para reemplazar a Comey como "sobresalientes", "muy conocidos" y "del más alto nivel".
Las entrevistas a los aspirantes comenzaron el sábado, dirigidas por el fiscal general de EE.UU., Jeff Sessions, y su "número dos", Rod Rosenstein, confirmó a Efe una fuente familiarizada con el proceso.
Entre los nombres que suenan para reemplazar a Comey están el actual director interino del FBI, Andrew McCabe; el senador republicano John Cornyn; el juez Michael García, de la corte de apelaciones de Nueva York, y Alice Fisher, exjefa de la división criminal del Departamento de Justicia.
También están Adam Lee, responsable de la oficina del FBI en Richmond (Virginia); Frances Townsend, exasesora de seguridad nacional y contra el terrorismo de George W. Bush, y el antiguo congresista y exagente del Buró Mike Rogers, quien tiene el apoyo de la asociación de agentes de esa agencia federal.
La Casa Blanca ha incurrido en numerosas contradicciones al explicar la decisión de Trump, quien ha negado haber exigido "lealtad" a Comey, algo que fuentes cercanas al exdirector del FBI aseguran que hizo durante una cena privada entre ambos a finales de enero.
Trump no ha querido confirmar si tiene grabaciones de las conversaciones que mantuvo con Comey, al ser preguntado en una entrevista en la cadena Fox por un tuit que envió el viernes y en el que indicó que "más le valía" al exdirector del FBI que no hubiera "cintas" de esas charlas, "antes de que él empiece a filtrar a la prensa" su versión de los hechos. EFE Mayo 2017 16:54